“Ratones como hombres” se crían en una finca de Trabanca Sardiñeira que trae por la calle de la amargura a los dueños de una casa colindante. Así definía el matrimonio propietario a los roedores que la habitan junto a “culebrillas” y otros insectos que, asegura, acaban en su domicilio por la falta de limpieza de este terreno particular. El exceso ha llegado a un punto que “ya no podemos ni abrir las ventanas”, relataron. Y es que la vegetación ha alcanzado tal altura que es casi tan alta como su inmueble .
Camilo Navazas y su mujer expresaron ayer su frustración y afirmaron que los hechos ya están en conocimiento del Ayuntamiento, pero sin resultado positivo. “Ya no sé cuantas veces fuimos al Concello y nos dijeron que no nos preocupáramos, pero nada”, explican.
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Llevan un año exigiendo una solución, es decir, que la administración local haga valer su potestad para obligar a mantener limpia la propiedad en cuestión, que pertenece a un vecino de Vilagarcía. Sin embargo, el matrimonio ya lo veían venir mucho antes y afirma que “lleva por lo menos cinco años sin limpiar”.
La molestias son varias, como la aparición de “ratones como hombres” o pequeñas culebras que crían entre la frondosa vegetación salvaje y acaba entrando en el domicilio de esta pareja, ubicado en la calle El Castro, en Trabanca Sardiñeira. De hecho, Navazas y su mujer están desesperados y ya no saben a quien acudir porque “ya ni podemos abrir las ventanas”. Además del riesgo que puede suponer toda esa masa vegetal que nace pegada a su vivienda en caso de incendio.
Esperan que el Concello se ponga manos a la obra de una vez, aunque se mostraron bastante defraudados con su actitud porque incluso han intentado hablar con el alcalde, Alberto Varela, pero sin éxito, aseguran.