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jueves | 25 abril | 2024
Vilagarcía registraba ayer 129 positivos, su máximo histórico de la pandemia, por lo menos desde que se ofrecen casos por concellos. La última vez que estuvo tan cerca fue el 20 de diciembre, con 128, pero había ido mejorando, siendo 87 casos su mejor dato hasta que el 11 de enero la curva volvió a dispararse. Esta y otras cuestiones valoradas por el comité clínico de la Xunta la mantienen bajo las más severas restricciones desde hace tiempo, aunque más preocupante es la incidencia acumulada a 14 días que están registrando los concellos del Ulla-Umia. En algunos está desbocada y solo Portas va por buen camino, con menos de 9 nuevos positivos en ese periodo de tiempo.
Pontecesures presenta la peor situación pues multiplica por ocho la clasificación más grave, es decir, haber registrado más de 250 positivos por cada 100.000 habitantes. En su caso, ese indicador está en los 2.228 casos de una hipotética población de ese tamaño, pues la villa bañada por el Ulla tiene poco más de 3.000 habitantes. El segundo puesto de este desafortunado ranking lo ocupa Valga, que sextuplica el marcador con 92 nuevos casos en los últimos 14 días, y el tercero es para Cuntis y Catoira, que casi cuadriplican este tope.
Hospitalizados de Cuntis
El alcalde del primero, Manuel Campos, ha llamado al autoconfinamiento voluntario porque “sei que é duro”, pero “os próximos 21 días son cruciais e debemos ser estremadamente coidadosos e renunciar todo o posible á interación social”. De hecho, apuntó que “lamentablemente” tienen casos de vecinos hospitalizados por Covid y destacó el brote comunitario en la parroquia de A Portela, cuya población (191 personas) están llamadas hoy a un cribado del Sergas. Además el Concello va a fumigar los espacios públicos.
Cambados se estabiliza
En cuanto a Caldas y Moraña duplican la cifra con 61 y 22 nuevos casos en las dos últimas semanas. Aunque más llamativo es el caso del ayuntamiento morañés pues en una semana ha sufrido un notable incremento. Situaciones como estas serán valoradas hoy en la reunión del comité clínico y no se descarta elevar a más poblaciones al nivel máximo de alerta y, por tanto, al endurecimiento de las medidas para tratar de frenar el contagio.
En la comarca de O Salnés, la situación se estabiliza en algunos casos como Cambados, que lleva una semana en bajada continua hasta llegar a los 24 positivos. La última vez que registró una cifra similar fue en octubre, aunque cabe recordar que llevaba dos meses bajo las restricciones más severas. Los casos también se reducen en O Grove (15) y en A Illa, que está en 58 tras haber llegado al centenar y generar gran preocupación, hasta el punto de ser sometida a un cribado masivo de toda su población y, aunque la participación fue alta, solo detectó ocho positivos en 3.000 personas. Meaño y Ribadumia siguen rondando los 13 y 14 positivos, pero también hay otros municipios donde el aumento es notable. Es el caso de Sanxenxo, con siete más (42) y Vilagarcía, que ha alcanzado su máximo histórico con 129 tras aumentar en ocho más entre ayer y el sábado. Pero también de Meis y Vilanova, donde los casos se han triplicado y casi duplicado en la última semana: ayer registraban 25 y 30, respectivamente.
Fallecido número 91 en el área
El panorama general en el área sanitaria Pontevedra- O Salnés también es de aumento, con menos curados (62) que nuevos infectados (91), que dejan el total de activos en 983, con dos nuevas hospitalizaciones en el Hospital do Salnés (9 en total). En Montecelo y Quirón se mantienen en 44. La UCI sigue con 12 pacientes y ayer se registró la muerte número 91: la de una mujer de 78 años. También hubo fallecimientos en Santiago-O Barbanza, en el Chus: dos hombres de 85 y 74 años. Todos tenían patologías previas. En esta zona, hay 2.245 casos de los cuales, 95 está en hospitalización convencional y 14 en UCI.
