El Concello de Vilagarcía espera que como cada año la Festa da Auga atraiga hoy a la ciudad a miles de personas, pese a las previsiones de lluvia. Más de un centenar de efectivos de distintos cuerpos policiales y el Servizo Municipal de Emerxencias e Protección Civil se encargarán de la seguridad, mientras que la limpieza implicará a personal de Ravella y a la concesionaria Cespa, lo que dejará un total de 76 trabajadores en las calles.
Desde primera horas de hoy efectivos de Cespa y de Medio Ambiente se desplazarán a las playas y zonas anexas, donde se suele concentrar el botellón. La concesionaria dispone de dos camiones de recogida y un tractor. También se acondicionará la zona de Vista Alegre para instalar juegos infantiles.
Sobre las tres de la tarde, unos 26 operarios de Cespa se desplazarán al centro para comenzar retirar los restos del Agua, empezando desde el barrio de San Roque y recorriendo la zona húmeda.
Una de las novedades de este año es que el Concello alquiló baños portátiles para la Festa da Auga. Son un total de veinte cabinas con aseos y 2 más con seis urinarios de pie. En cuanto al operativo de seguridad, la Guardia Civil realizará controles de consumo de alcohol y drogas en los conductores en los principales accesos y la Autonómica prestará especial atención a la venta de bebidas alcohólicas a menores.
Unidades de Intervención de otras Comisarías reforzarán los efectivos policiales. Emerxencias desplazará a 16 efectivos (8 voluntarios y 8 trabajadores municipales) a la zona de las playas desde las nueve de la noche de hoy. Mañana, 22 efectivos se distribuirán por la zona húmeda.