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viernes | 19 abril | 2024
Las trabajadoras de Cuca han llenado de carteles el casco urbano de Vilaxoán para pedir la soliradidad de unos vecinos que han crecido en torno a una de las fábricas históricas del municipio, hoy condenada al cierre por las intenciones de sus nuevos dueños, el grupo Garavilla (la adquirió hace un año) de trasladar a O Grove todo el capital productivo.
Hoy mismo tendrá lugar una concentración delante de la nave en la que la plantilla mostrará su unánime rechazo al cierre. Los trabajadores y sus represetantes sindicales consideran que no existe ningún motivo para esta medida.
Los sindicatos advierten de que no hay nada por escrito que garantice todos los puestos de trabajo
“No son razones económicas, sino de organización. Los pedidos iban bien y estas últimas semanas fueron de mucho trabajo”, asegura Francisco Vilar, de Comisiones Obreras. Además, el delegado sindical hace hincapié en que no existe ningún compromiso escrito por parte de la empresa sobre el mantenimiento de los puestos de trabajo.
Aunque en una reunión con el alcalde, Tomás Fole, los representantes de Garavilla manifestaron su intención de conservar el cien por cien de la plantilla, ni los trabajadores ni los sindicatos quieren aferrarse a estas palabras. Por el momento, lo único que saben es que se plantea un ERE de seis meses, tiempo en el que se estima que dure el traslado a la fábrica meca.
Por ello, el comite de empresa de Cuca ya ha fijado un calendario de movilizaciones que empieza hoy con la concentración de las once de la mañana pero que continuará estos días. La cita más importante es la del viernes, cuando una manifestación ciudadana recorrerá las calles de Vilagarcía en defensa de la única conservera en funcionamiento en la capital arousana. Comenzará a las siete de la tarde y recorrerá el centro del municipio. Trabajadores y sindicatos piden la solidaridad de la ciudadanía.
Pero, además, las centrales con representación en Cuca, CCOO y UGT, mantendrán una reunión con la empresa en la que mostrarán su rechazo al traslado. Los sindicatos están también pendientes de un encuentro con Fole y aunque el alcalde aseguró ayer que se produciría esta misma semana, Vilar explicaba ayer que todavía no habían recibido ninguna llamada.
Lo que pretenden con este encuentro es solicitar el apoyo del Concello para pedir el mantenimiento de una de las pocas empresas que quedan en pie en el municipio. Sin embargo, el regidor popular ya aseguró tras el encuentro con el grupo Garavilla que el gobierno local “está atado” y que da la fábrica por perdida.
Una actitud que critican duramente desde el Bloque Nacionalsita Galego, que acusa a Fole de “deixar morrer Vilagarcía”. En este sentido recuerdan otros cierres de empresas emblemáticas que se produjeron recientemente, como Megasa, Peña (actualmente Alfageme), “e agora Cuca”. Estas dos últimas fábricas están situadas en Vilaxoán y los nacionalistas piden a Fole que explique cuál es su proyecto de futuro para este pueblo e indican que lo que “precisa Vilagarcía é un alcalde que defenda os postos de traballo e non os deixe marchar sen máis como leva acontecendo co peche de empresas importantes nos últimos tempos”.
Además, inciden que en el caso de Cuca “é dobremente grave” ya que se trata, indican desde el BNG, de una plantilla en un 90% femenina, “factor a ter en conta dada a problemática das mulleres á hora de introducirse no mundo laboral, e polo tanto, tralos depedimentos, de atopar un novo posto de traballo”.
