ALBERT Rivera, el político antes conocido como Adolfo Suárez, es un poco veleta para algunas cosas –una noche se acostó socialdemócrata y por la mañana se levantó liberal–, pero inamovible para otras. Por ejemplo, en la elección de candidatos de lo más pintoresco en Galicia: desde Antonio Rodríguez, quien proclamó que las propuestas de su partido se darían a conocer al día siguiente de las elecciones, hasta Marta Rivera de la Cruz, quien confesó que Ciudadanos tenía un programa estatal que ya se adaptaría a Galicia. Cayetana “Rambo” Álvarez de Toledo, musa del sector más reaccionario del PP, tiene una obsesión parecida polo país. Turró y turró para que Feijóo lanzase na terra la marca España Suma, pero fracasó y hasta en Madrid le dijeron que se callase de una vez. Sin embargo, se ve que es insistente y que no tiene ni idea de cuál es la realidad de Galicia, pues ha cambiado la letra de su letanía, pero mantiene el espíritu y espera que el premier “integre” al centro-derecha enxebre pese a rechazar España Suma. Si ya lo tiene integrado... si en Galicia no hay más centro-derecha que el suyo. Integrar a Ciudadanos y Vox supondría desintegrar el PP. FOTO: cayetana, triunfadora | aec