Hábil con los pies y con las manos

Kennedy Bakricioglu nació hace 39 años en Suecia, en el seno de una familia de etnia asiria, y le dio por el fútbol. Pero bien le podía haber dado por el balonmano, el rugby o el béisbol, algún deporte en el que las manos fuesen una herramienta clave. Actualmente juega en el Hammarby –entre 2010 y 2012 lo hizo en el Racing de Santander– y en el último partido le marcó un golazo por la escuadra desde 30 metros al Goteborg. Corrió hacia la grada para celebrarlo con la afición y un espectador le lanzó un vaso de cerveza, lo cogió al vuelo y se lo bebió. ¿Vale para un deporte donde las manos sean decisivas o no?