Xulio Ferreiro se disfraza de mártir para celebrar el Samaín

DÍA completo para Xulio Ferreiro, el Varoufakis de A Gaiteira: por la mañana se dio una vuelta por el ayuntamiento, por la tarde tuvo la procesión de Samaín y por la noche jugó el Deportivo. Pero entre tanta actividad –hacer tres cosas en un día es para el alcalde tanto como para un mortal correr tres maratones en 24 horas– aún tuvo tiempo para disfrazarse de mártir y abrir la puerta a una cuestión de confianza si no consigue sacar adelante los presupuestos. “Es un instrumento más, está ahí; y si es necesario, que confío en que no lo sea, se utilizará”, sentenció el Príncipe de las Mareas. La oposición decidirá qué hace, pero ya que el regidor ha abierto esa puerta quizá no sería malo que le facilitase la posibilidad de franquearla. Desde luego, miles, muchos miles, de coruñeses estarían eternamente agradecidos a quienes los hubiesen librado de una tortura como la que sufren desde que la Marea, nasía para ganar, gobierna la ciudad.