Punto límite

Amigos: “En los periódicos, siempre voy directo a las páginas deportivas que registran logros humanos. Las primeras páginas solo contienen fracasos” ( Earl Warren). “La publicidad, no es más que el ruido de un palo golpeando un caldero una y otra vez” (George Orwell). “Un banco es un lugar donde te prestaran dinero, si puedes demostrar que no lo necesitas” (Bob Hope).

Como dijo alguien, los tiempos cambian que es una barbaridad.  En aquellos tiempos las cosas que no funcionaban y se estropeaban se arreglaban, hoy se tiran y se compran otras. Esto pasa en las cosas materiales e inmateriales. La tecnología va con mucho por delante de la capacidad cognitiva del ser humano normal, para tener tiempo de asimilar, estudiarlas y ver sus virtudes y defectos para la persona y crea unas potenciales necesidades  de su uso y consumo, de manera compulsiva e inapropiada en la mayoría de los casos. Un ejemplo claro es ver a un humano, y digo bien, humano, que transite por una calle cualquiera, con un artilugio hablando, haciéndose fotos a sí mismo, o a otros, o wasapeando cruzando un paso de peatones con semáforo, yo los llamo los zombis urbanos.

Me niego en rotundo a aceptarlo, la libertad tan largamente luchada y anhelada y conquistada desde los principios de la humanidad se nos viene abajo como un castillo de naipes en un abrir y cerrar de ojos. Está bien el progreso, por supuesto, pero es anormal y delictiva la indecencia de las multinacionales para hacernos fanáticos de un progreso material que nos hace más dependientes y adictos a toda clase de estructuras mercantiles, sociales y sobre todo auto destructivas como sociedad, y eso ya está ocurriendo, nadie o casi nadie lo díce, claro, porque una mayoría ya estáis absorbidos, por esa maquina infernal, llamada móvil.  Para llamar antes te salía una operadora de tu pueblo o ciudad y te preguntaba con qué número querías conectar, si llamaban varios a la vez, a esperar o colapso. Un servidor ha vivido todo eso y no soy tan carroza.

No y me niego rotundamente a este avance desmesurado e insostenible y sin planificación previa de sus consecuencias en un futuro inmediato, y todo es producto de un mismo problema la codicia de unos cuantos que fruto de ese afán de ser más y mejor que su competencia hacen trabajar sin pausa ni descanso a las masas primero para que fabriquen y luego consuman el producto, uno que por cierto mañana ya habrá otro en el mercado, mejor, por eso mismo todos los deshechos de esa maquinaria a nivel global, productos químicos, potencialmente mortales, humos, productos inorgánicos, etc. que no se degradan, hasta miles de años después, los está absorbiendo la madre tierra, y ésta como buena madre tiene paciencia y nos da avisos, hasta que ya no aguante más.

Personalmente creo que el humano no quiere a la tierra, simplemente la usa y luego la tira, pero hay un problema no podremos comprar otra, ahí esta la diatriba, o respetamos a nuestra madre tierra o se nos muere y todos con ella, la industrialización salvaje el avance desmesurado y sin conciencia, al final nos perjudicará a todos, lo veréis y ojalá me equivoque, que va a ser que no, si no respetamos a conciencia nuestro presente ralentizando un avance salvaje y con medidas claras más temprano que tarde nunca tendremos un mañana y  nos quedamos sin futuro, no podremos contar nuestro pasado a nadie, porque nadie quedará para escucharlo, no quedará ni este papel que estáis leyendo ahora mismo para que alguien perdido, a modo de milagro, lo lea y diga, jooo, que razón tenía este tipo, lo clavó.

Sinceramente prefiero estar equivocado, y seguir en nuestra madre tierra que tanto nos dio sin pedir nada a cambio, como hacen nuestras propias madres, pero cuando el humano mete la mano no vuelve a crecer la hierba. Y los demás a obedecer. Me niego rotundamente. Al menos yo. Quien se apunta?.

Un saludo amigos.  Saúde e Terra. 

Punto límite

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