Blindaje de las pensiones

habrá que hacer algo para solucionar el problema de las pensiones y los pensionistas. Entre otras cosas habrá que proceder al blindaje de las mismas y que ningún gobierno cambie las reglas a su antojo durante su mandato. No se puede ni se debe someter a los pensionistas, a ningún cambio por las circunstancias políticas. Los gobiernos no quieren hacer reformas económicas de calado para disminuir el gasto público que generan las administraciones con actividades segregadas, pero duplicadas en una maraña engorrosa. Pero los impuestos siguen aumentando y todavía exigen más contribuciones a un país que está al borde de un ataque de nervios.
El Gobierno se lanzó al rescate de la banca, que costó más de 60.000 millones de euros, y ahora esa misma banca tiene cuantiosos beneficios; en el ejercicio que acaba de finalizar, los mayores de su historia reciente. Pero no ha aportado nada a las arcas públicas de aquel rescate que se cargó a lomos de los contribuyentes. La banca gana más que nunca y los ciudadanos, ya sean pensionistas, asalariados o autónomos, sufren las penurias de de una crisis permanente y apenas cuentan en los planes del Gobierno.
El Estado se ha ahorrado en estos años de crisis una millonada, debido a que no actuó socialmente como debía hacerlo y como era de esperar por su responsabilidad. Este testigo lo han tenido que asumir en su mayoría las familias, sobre todo los pensionistas, que han tenido que sostener a sus hijos y nietos por haber venido mal dadas, cuando era una responsabilidad de los gobernantes. Pero estos obviaron su papel social y aquellos solos sacaron de la crisis a España. Esto es una realidad, que otros disfrazan sin razón.
De modo que subir ahora las pensiones un 0,25%, cuando la inflación y los precios se disparan, es condenar a los pensionistas, asalariados y autónomos a unos sueldos de miseria e infravalorar la realidad ¿Hay dinero para las pensiones y salarios? Sí. Lo que ocurre que es más fácil tomar medidas sencillas antes de afrontar una reforma fiscal, política y monetaria que haga aflorar el fraude fiscal y propicie una regulación de las administraciones, haciéndolas más, pequeñas, eficientes y cercanas al ciudadano. Eliminar las gabelas políticas y cumplir las leyes, así como un mayor control de gasto sobre las finanzas de las diversas administraciones públicas, evitando fugas indebidas y desvíos de fondos que no benefician a los ciudadanos y, en cambio, causan una extorsión en la recaudación impositiva.
Así las cosas, es preciso blindar para el derecho a las pensiones, al igual que los salarios. Cuanta más retribución tengan los grupos sociales, mayor desarrollo económico experimentará la sociedad, al disfrutar de un mayor poder económico. Todo es cuestión de saber hacer las cosas y no cargarlas a las clases menos favorecidas, mientras la clase política sigue con lo mismos privilegios que ha tenido siempre, pese a la crisis que vivió el paísUna parte de la sociedad cargó con ella, pero no toda la sociedad. Merecida tienen los pensionistas una subida, sobre todo los que cobran las ayudas mínimas.