MARISCADORAS LEGALES E ILEGALES

Algo está pasando, en las playas de los municipios de Boiro y Rianxo, con algunas familias humildes, con escasos recursos y que viven situaciones de auténtica exclusión social, sin prestación económica alguna y que bajan a la playa a mariscar, cada día, para la subsistencia familiar, de manera ilegal. Sin duda hay un problema que no es nada novedoso. Lo peor de todo es que se está enquistando y hace mucho daño a todas las partes que lo sufren. Muchos años llevan faenando sin licencia para ello, eso lo reconocen públicamente, pero la solución nunca puede pasar por el enfrentamiento entre mariscadores legales e ilegales. Tampoco en la imposición de continuas sanciones económicas, por parte de la Consellería del Mar de la Xunta de Galicia. En algunos casos, el importe de las sanciones acumuladas, superan los 18.000 euros, incluso con anotaciones de embargo sobre sus viviendas habituales, con la posibilidad de subasta pública de las mismas hasta provocar el desahucio definitivo de la única vivienda que poseen, la mayoría de estas familias. Por otra parte, hay que señalar de manera objetiva, que mucho menos la solución puede pasar por castigar, el marisqueo ilegal, con penas de privación de libertad. Hay que ser realistas y entender que, muchas de estas familias, carecen de recursos económicos y han solicitado, en su día, las autorizaciones correspondientes, siéndoles denegadas por silencio administrativo. Lo cierto es que hay playas y recursos suficientes para ser explotados, de manera racional, por un mayor número de mariscadores y para eso hay que sentarse a dialogar y llegar a un consenso entre todas las partes implicadas.