Este es el panorama

Según una docta opinión, mezclando la reciente realidad –28 de abril– con el futuro (26 de mayo) si extrapolamos los resultados electorales ya conocidos,  los próximos serán un nuevo triunfo de los socialistas y otro paso atrás de los populares.

El CIS, que se dedica a eso, nos informa de que los feudos del PP están amenazados y anuncia la victoria al PSOE en todas las comunidades que celebran elecciones salvo Navarra y Cantabria. Añade vuelcos históricos en Castilla y León y Madrid, dos importantes bastiones durante años, de los populares. En el caso de Madrid, que desde la victoria de Aguirre en 1995 –la del “tamayazo”, recuerden– tenía su reino la gaviota, la victoria tiene un valor especial. A los socialistas les hace falta pactar con Errejón y Podemos, algo que ya se vislumbra en el horizonte. Es un vaticinio, no un certificado, que conste.

En Europa, otro duelo para el domingo 26, la socialdemocracia, reconfortada por el resultado del PSOE en abril, confía en que el 28-A les impulse en las europeas, donde la derecha avanzó en los últimos tiempos, aunque la “caída” de Casado preocupa, ya que al centroderecha los sondeos les dan una treintena de eurodiputados menos que en los pasados comicios. También preocupa en Europa la deriva del PP que en su día apoyó al primer ministro hungaro y su disposición a estrechar lazos con otro ultra conocido: Matteo Salvini. Casado está ahora en el dilema de buscar su sitio entre los ultras y los liberales 

En España se han puesto en marcha hasta una docena de coaliciones, donde irrumpe la ultraderecha, con los euroescépticos de Alternativa Española; y hay grupos de Falange, Democracia Nacional, por un lado, y Unidas Podemos Cambiar Europa, por la otra banda, añadiendo una parte de Equo que se parte en dos. Sumen a esta lista a nacionalistas e independentistas: ERC, Bildu, el BNG y al PNV, Coalición Canaria. Añadan también a las Mareas y a esperar.

Este es el panorama donde el PP y el PSOE quieren convertir esta elección en una réplica del pasado 28 de abril, o una venganza o revancha. Según las encuestas, los socialistas podrían conseguir el 30% de los votos y los de Casado ganar la pugna con Ciudadanos, que en Galicia no tendrían representación, mientras el BNG quedaría, por muy poco, en puertas. El sondeo otorga entre 17 y 18 escaños al PSOE y 11 o 12 a los populares.

Al final, reconozcámoslo, esto es un crucigrama, más que un panorama.