Narciso

dios nos libre de los amigos que de los enemigos me libro yo. La verdad es que nuestro refranero es una fuente de sabiduría. Y el refrán viene a cuento porque en mi opinión los estrategas de la Moncloa han tenido la infeliz ocurrencia de que Sánchez fuera recibido en el Consejo de Ministros como si fuera el héroe recién llegado de una batalla. Se trataba de poner en valor el acuerdo obtenido por la UE para la distribución de una ayuda imprescindible para afrontar la crisis del coronavirus. Sin duda, Sánchez se ha batido el cobre al igual que el primer ministro italiano para que la cuantía y distribución de los fondos sean suficientes para paliar los efectos de la crisis.
Y analizando los resultados yo diría que no hay vencedores ni vencidos, todos los Jefes de Gobierno han cedido. De manera que se han pasado siete pueblos los lumbreras a los que se les ha ocurrido que hay que dar tratamiento de héroe a Pedro Sánchez diseñando una vergonzosa puesta en escena en que todos los ministros le han hecho el “pasillo” para aplaudirle. Los asesores del Presidente le han hecho un flaco favor porque la idea que dan de él es que es un Narciso. Yo no sé si en realidad lo es o es que tiene una fe tan ciega en sus asesores de imagen que les deja hacer, y en ese dejarles hacer no se da cuenta que le colocan en situaciones ridículas.
La escenita de los ministros aplaudiendo entusiastas al Presidente que pasa entre ellos con gesto de triunfador es de vergüenza ajena. No comprendo como personas mayores, y se supone que al menos medianamente inteligentes, se han prestado a esa puesta en escena .
Ni siquiera cuando el Gobierno de González consiguió la incorporación de España al Mercado Común se organizó un numerito como el que han protagonizado Sánchez y sus ministros. Vamos, que a nadie se le ocurrió la estrafalaria idea de que González fuera recibido como un héroe. Lo he escrito en otras ocasiones, creo que los asesores de imagen del Presidente creen que los ciudadanos somos poco menos que marionetas a las que pueden mover a su antojo y, vuelvo a repetirme, en mi opinión a Sánchez le sobran tantos y tantos pelotas a su alrededor que lo único que hacen es masajear su, al parecer, excesivo ego. 
Sánchez ha hecho un buen trabajo en Bruxelas ,pero lo mismo se puede decir de Angela Merkel, de Macron o de los “frugales” Mark Rutte o Sebastian Kurz. Ninguno ha ganado, ninguno ha perdido del todo. Pues eso. 

Narciso

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