La fuente de la Plaza de España

Denunciaba yo el lamentable estado de la Plaza de España, haciendo referencia a la incomprensible “reforma” de los parterres a los cuales se les ha secado por completo la hierba que, en principio, los cubría. Solo ha tenido que pasar apenas un mes desde su “inauguración” para comprobar que, sobre todo las esquinas, eran esquilmadas del césped por el paso de los peatones quedando estas solo con tierra. ¿Por qué pasa esto? Por lo que he reiterado siempre: que faltan los bordillos que delimitan los parterres al ras de los pasos de los peatones; ¡ así de sencillo! Y mientras no se hagan así, como decía un ministro…”los experimentos… ¡con gaseosa!”.
Hoy tengo que denunciar el triste espectáculo que nos ofrece la fuente de dicho jardín y lo cierto es que no soy capaz de entender lo que pasa con ella pues ahora tenemos un problema que no ha habido nunca.
Aquellas personas mayores, como yo recordarán, seguramente con cierta nostalgia, como las cabezas arquitectónicas de la fuente estaban echando agua día y noche manteniendo un nivel de agua en la fuente así como un “espejo de agua” que ahora no tiene. Recordarán, incluso, que al lado de esas cabezas se mantenían unos pies de Calas que se han eliminado y hasta ha habido una época en que había peces rojos de agua fría lo que denotaba la calidad y limpieza del agua. Ahora, la fuente es un desastre con un agua que es una inmundicia, sucia, escasa y turbia y el conjunto ornamental de la misma echa agua únicamente a ciertas horas lo que me hace suponer dos cosas: 1ª Que el agua procede de un depósito para suministro a la fuente y 2ª Que el fluido, en circuito cerrado, está gobernado por un reloj temporizador juntamente con una bomba de impulsión. ¿Por qué antes tenía agua día y noche y ahora se ha optado por este “novedoso sistema”? No sé si antes el agua procedía de algún manantial o de la red general lo que si sé es que el “novedoso sistema” ocasiona un mantenimiento muchísimo más delicado (que no tiene) y, en verdad, mucho más caro pues hay que dotarlo de electricidad, filtros, algicidas y herbicidas por cuanto el aire arrastra polvo, semillas y hojas que enturbian el agua dando el deplorable aspecto de abandono que ahora tiene.
Cierto es que no se pueden evitar las hojas de los plátanos puesto que son de hoja caduca y en esta época, las hojas secas caen en grandes cantidades no obstante, corríjanme si me equivoco, en el Concello hay un departamento llamado “parques y jardines” que debe ser el encargado de que estos luzcan mediante la vigilancia, el debido mantenimiento y funcionamiento de todos los elementos. ¿Funciona? Lo dejo al albedrío de los que tan amablemente me leen.
En conclusión: Las deficiencias son notorias se miren por dónde se miren y deben corregirse estas con el fin de que la fuente pueda lucir el esplendor que ha tenido siempre. ¿Cuál es el problema de que no se recurra al mismo sistema de abastecimiento que tenía antaño?. Haciendo memoria recuerdo cuando en Vilagarcía había serios problemas de falta de agua con cortes constantes y las quejas de los vecinos que, viviendo en un cuarto piso o un quinto, como yo, no teníamos agua en casi todo el verano porque no había fuerza para que llegase a ellos y, sin embargo la fuente mantenía los chorros de agua sin interrupción. ¿No es posible que, ahora que hay agua en abundancia, se pueda poner el mismo sistema de antaño?; la pregunta queda ahí en el aire.

La fuente de la Plaza de España

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