Las derechas no quieren gobierno

La democracia es de la derecha y de la izquierda y forma gobierno quien puede y en esta ocasión la derecha no pudo, pero no es motivo para desgañitarse. Los comunistas elegidos en urnas pueden formar gobiernos con otros como debe ser en democracia. Pero no pueden aplicar su ideología al cien por cien, ni falta que hace, pero a veces son necesarios para reparar los recortes en crisis por gobiernos de derechas privatizando lo público a favor de especuladores en detrimento de las clases sociales más desfavorecidas.  

La triple derecha compite entre ella en decir groserías para cabrear a la gente y ganar espacio electoral descalificando un gobierno antes de tiempo por haber comunistas en él,  de paso atacan Sánchez . De esa manera nos quieren hacer creer que será la ruina (no de los necesitados por los recortes sufridos en beneficio de los más ricos mientras siguen pendientes de rescatar de la miseria muchos españoles). Tranquilos, España no es Venezuela por muchos ministros comunistas que haya en el gobierno de Sánchez. Pero, la derecha encaja mal su derrota y vaticina un gobierno Frankenstein tal como en su día dijo el exministro Rubalcaba, dicha frase ahora el PP la hace suya para afear al gobierno  Sánchez y al PSOE-Podemos, pero recordemos como por aquellos tiempos le escuchamos culpar de utilizar el cargo del Ministro inventando la corrupción del PP que más tarde se confirmó real gracias a las grabaciones del concejal de ese mismo partido en el ayuntamiento de Majadahonda, José Luis Peñas, que las entregó a la justicia y a raíz de eso hay varios cargos del Partido Popular en la cárcel. 

Los comunistas del PCE han colaborado con la transición y en los pactos de la Moncloa, con Carrillo al frente. Ya hacía años que se distanciara de los comunistas de la URSS fundando el eurocomunismo con el italiano Berlinguer, el francés George Marcháis, cosa que la derecha debiera imitar para adaptarse a los tiempos que corren y ayudar a hacer Patria con las necesarias reformas en vez de tanta jauría. 

Pero para acabar con la incoherencia de esta bravura y poco constructiva política recordemos los ministros de origen comunista en los gobiernos de Aznar y Rajoy: José Piqué, Celia Villalobos, Pilar del Castillo, Ángel Rodríguez, etc. y otros cargos intermedios y no pasó nada. Es posible que sirvieran para evitar que el PP se escorara más a la derecha. Lo mismo pasó en los gobiernos de Felipe González con ministros comunistas en sus gobiernos y otros cargos en las administraciones y tampoco pasó nada. No es de recibo que después de cuarenta años de la legalización del PCE aún andamos con estas falaces torpezas.

Por lo tanto, menos lobos, menos miedos y más sensatez porque esta forma de hacer política es nociva para los intereses generales y es indigna de una derecha ilustrada que presume títulos por doquier, pero aún no se equiparó en hábitos democráticos como la derecha europea. Mejor sería que colaboraran con el nuevo y legítimo gobierno elegido por los votantes empleando su tiempo en ayudar a resolver las necesidades de las personas. 

Las derechas no quieren gobierno

Te puede interesar