Productos como las sandías, los melones o los melocotones se encarecieron en plena ola de calor
La velutina se alimenta principalmente de néctar y fruta y destroza las piezas para su posterior comercialización.
Las diferentes Cáritas Parroquiales recogen y reparten estos días dos toneladas de frutas que, al desplazarse esa carga, se derramaron dentro de un remolque frigorífico de un camión en el que eran transportadas y que, aunque ya no pueden verderse, están "impecables", según indicaron los responsables de estas entidades de ayuda a los necesitados.