Hay dos modalidades: viajes en autobuses urbanos para quienes van a las poblaciones vecinasde Tánger, Tetuán o Rincón y en autocares mejor equipados para distancias más largas, como Fez o Casablanca.
En el último espigón que separa entre Ceuta y Castillejos (por el que penetraron miles de personas los pasados días) está vacío, mientras van volviendo migrantes desde Ceuta.