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martes | 23 abril | 2024
O Grove vivió ayer una de las celebraciones más extrañas pero emotivas de su tradicional fiesta del Carmen, que tuvo que limitar sus actos previstos a consecuencia de la situación sanitaria y la nueva normalidad. Este, sin duda, ha sido un año diferente pero con la misma devoción de siempre a la Virgen del Carmen, la patrona de los marineros, a quien se encomiendan para que les proteja en su día a día durante sus duras jornadas de trabajo en el mar.
Un mar que tanto da a sus gentes, pero que, por desgracia, a veces quita. Y es por ello que el 16 de junio es una fecha especial sobre todo en los pueblos marineros, como es el caso de O Grove, donde ayer la conmemoración se centró en recordar a las víctimas que han perdido la vida en el mar.
Es el caso de los tripulantes del Tucán II, un pesquero con base meca y que en el pasado mes de febrero sufrió un accidente al norte de la Illa de Ons en el que falleció uno de los marineros, José Luis Vidal, tras caer al mar amarrado a uno de los aparejos. Fue el patrón del buque, Santiago Domínguez quien se lanzó al mar para rescatar a su compañero aunque no pudo salvarle la vida.
Un acto extremadamente valiente que durante la celebración de la misa solemne en honor a la Virgen del Carmen, fue reconocido con la entrega de las “Medallas do Carmen” que entrega la comisión de fiestas..
El reconocimiento del mar
La Eucaristía estuvo presidida por el arzobispo, monseñor Julián Barrio, junto a otros siete curas que celebraron las ofrendas por todos los marineros fallecidos.“Mirar a la Estrella de los Mares para buscar en ella orientación, consuelo y sentido cristiano en nuestra vida”, aconsejó Barrio.
Un consuelo que no llega para los familiares de Luis Vidal. Su mujer, visiblemente afectada, recogió la medalla póstuma a su marido, que fue entregada por el Capitán Marítimo de Vilagarcía de Arousa, quien también hizo el reconocimiento a Santiago Domínguez por su valerosa acción al rescatar el cuerpo de su compañero marinero.
El presidente de la comisión de fiestas Virxen do Carmen, Juan Fugas, también otorgó sendas distinciones al alcalde de O Grove, José Antonio Cacabelos y al tercer tripulante del barco.
Desde la comisión de fiestas, Juan Fugas reconoce que la organización de este acto ha sido laboriosa, sobre todo teniendo en cuenta la actual situación sanitaria y la normativa establecida de seguridad, sin embargo, “todo saleu ben” confiesa, “había moita xente, cumpliuse o aforo de 93 personas dentro da igrexa e tamén había xente fora escoitando a misa pola megafonía, e vendo a coral”, ademáis, todos os asistentes levaban a mascarilla posta e respetouse en todo momento o distanciamiento social”
Control policial
Unas medidas sanitarias que también fueron controladas por los agentes de la Policía local personados en la iglesia de San Martiño. La patrulla se encargó de informar a la gente, y en los casos más graves, denunciar el incumplimiento del uso de mascarillas en la vía pública.
Además, explican desde la Policía municipal, “dentro de la campaña de control de tráfico nas rúas peonís do casco urbano, realizáronse as comprobacións necesarias para evitar a afluencia de condutores, que non sexan residentes, prestándose especial atención á zona do Montiño”.
En este sentido, las fuerzas de seguridad agradecen“a colaboración e comprensión que estamos a ter, por parte da veciñanza, nesta labor tan importante para garantir a seguridade dos peóns nestas zonas, así como garantir un servizo de calidade nos establecementos hostaleiros ubicados na contorna”..
Rectoral de San Vicente
Tras la celebración del Carmen y aprovechando la ocasión, el arzobispo Julián Barrio visitó las obras de restauración de la Casa Rectoral de San Vicente de O Grove, que se prevé que sean inauguradas a principios del próximo año y que será un centro de campamentos y convivencias para jóvenes de la diócesis.
