Feijóo, Feijóo, Feijóo

"No se puede entender a Feijóo sin Galicia ni a Galicia sin Feijóo”. La frase fue pronunciada por Pablo Casado en el arranque la precampaña del PP y sigue resonando con fuerza en propios y extraños porque es una verdad como la Catedral de Santiago. Son dos realidades, dos conceptos que van íntimamente ligados, imposibles de explicar el uno sin el otro. La actual Galicia nunca hubiese sido posible sin la labor del Presidente y la talla política del líder de los gallegos nunca sería como es sin el respaldo de las grandes ciudades y los pueblos pequeños. Confío, espero y deseo que durante los próximo 4 años le volvamos a tener como referente, ya que no hay ningún otro candidato o candidata que pueda hacer, ni de lejos, lo que Galicia necesita.

Cada día que pasa de esta campaña se van aclarando más las cosas. La sed de intentar derrocar al único que antepone Galicia a todo lo demás es lo único que une a los que también se presentan. Lo de ver quién aspira a ser el jefe o jefa de la oposición parece una subasta de la lonja en la que hay quien no sabe a quién tiene que atacar más y a quién apoyar… Algunos empezaron como el mentos y la coca cola. Mucho ruido, mucha espuma, pero poco que llevarse a la boca, y así siguen. Hay quien ha medido mal y diseñó una campaña en febrero con la Sanidad como único ariete con el que atacar y la Sanidad, y también la pandemia, demostraron que tenemos que estar orgullosos y seguir defendiendo y haciendo crecer el mejor sistema del mundo. Visto con los ojos post-pandemia ruboriza, por falso y hueco, el discurso y las promesas de quien sabe que tiene las horas contadas y que nunca liderará nada porque no tiene madera de líder. Otros aspiran a ver si pescando votos al decir alguna bravuconada escrita con acento madrileño (pero sin proyecto para Galicia) pueden pisar moqueta, pero de propuestas concretas nada. Están demasiado “verdes”…

Me enorgullezco de estar en el partido que ha edificado las bases del presente y el futuro de Galicia. Me siento orgullosa de compartir candidatura con el que creo que es el político ideal para gobernar esta tierra. Me hago responsable de volcarme en cuerpo y alma para que Vilagarcía, O Salnés, Pontevedra y Galicia sigan teniendo un gobierno serio, responsable, que cuide y proteja a los que aquí vivimos. Me comprometo a hacer lo que mejor sabemos hacer en el PP, que es poner sentidiño pensando en todos y en todo, es decir, todo lo contrario de quien hoy apoya a unos y mañana a los contrarios porque no tiene ni la coherencia ni el criterio necesarios.

Cuando veo a determinado candidato vilagarciano intentar colarse en encerronas, que no le salen. Orquestar pseudodebates que al final no se celebran. Pretender marcar la agenda de otras fuerzas. Menospreciar a otros partidos y candidatos. Meterse a calzador en actos del Concello para aparecer en la foto. Hasta organizar mítines en los que solo ha logrado sentar a 7 personas cuando ya sabemos lo que es meter a 200 en actos similares… pienso: ¿En serio Galicia se merece representantes así…? Yo tampoco lo creo.

Como siempre dice Feijóo, “la fórmula es Galicia, Galicia, Galicia.” Los gallegos y gallegas primero y si por eso también nos critican, problema del que se queja. El Presidente es garantía de gestión, de confianza, de responsabilidad, de solidaridad, de sentidiño, de amor a esta tierra, de certezas, de trayectoria, de futuro, de solvencia, de estabilidad, de acierto, de anticipación a los problemas, de no dejar a nadie atrás… todo lo que no sea votar a Feijóo es renunciar a todo esto… Te pido el voto y la confianza para seguir avanzando. O Galicia, o el caos. O Feijóo, o el desastre. O el PP, o el abismo de los experimentos. ¿Qué Galicia quieres de aquí a 2024?... #sentidiño