La anulación de As Cabezas por la Covid no impide la llegada de romeros

En otras circunstancias, A Armenteira sería ayer un hervidero de fieles a la Virxe das Cabezas, pero la pandemia lo evitó por segundo año consecutivo. Ni siquiera se abrió el templo para evitar la tentación y que se produjeran las temidas aglomeraciones, pero romeros no faltaron. Muchos acudieron animados por el buen tiempo y la festividad en la localidad y en otras limítrofes. De hecho, hasta se instalaron algunos puestos de rosquillas y pulpo y era difícil encontrar mesa en las pocas terrazas de la zona. La Guardia Civil estuvo realizando vigilancias para controlar el cumplimiento de la normativa anti Covid y Protección Civil de Meis cortó con unas vallas el acceso rodado para evitar posibles atascos pues, cabe recordar que se trata de una zona humanizada. Con todo, muchos de los asistentes habían optado por llegar a pie, como manda la tradición y aprovechando la Ruta da Pedra e da Auga, por donde discurre también la Variante Espiritual do Camiño Portugués.