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sábado | 20 abril | 2024
El atípico Pleno de este mes en Ribadumia, que la oposición abandonó a los diez minutos por discrepancias sobre la puesta a disposición de documentación para el debate, sacó adelante con el gobierno en solitario tanto el plan de incendios como la delimitación de zonas de carga y descarga en el municipio.
En el primero de los casos, la aprobación inicial del llamado plan de incendios supone, según entiende el ejecutivo, un “gran avance” en el compromiso de establecer un “sistema público de xestión da biomasa nas faixas secundarias”. Este plan, todavía en fase de aprobación, llega tras la adhesión al correspondiente convenio firmado por Xunta, Fegamp (Federación Galega de Municipios e Provincias) y Seaga (Empresa Pública de Servizos Agrarios Galegos, SA).
En lo referente a la carga y descarga, el Pleno abordó la cuestión al hilo de las peticiones de comerciantes y responsables de locales de ocio. Con la delimitación clara de las zonas en cuestión, el gobierno municipal quiere facilitar el trabajo a estos pequeños empresarios, “a través da fixación duns criterios” objetivos y claros. Igualmente, se fijaron “características que deberán ter estas prazas, tales como adecuarse ás dimensións das actuais prazas de aparcamento ou contar con sinalización horizontal e vertical” acorde.
En una primera fase se prevé la habilitación de zonas de carga y descarga en la Avenida Bouza Martín, en el Caleixón Loureiro, en Ramón Cabanillas y la calle Valle Inclán.
El los ruegos y preguntas, a pesar de que no estaban presente ningún grupo de la oposición, se dio respuesta las dudas manifestadas por Somos Ribadumia sobre la posible ilegalidad de la reforma acometida en el parque infantil de Barrantes.
El alcalde, David Castro, se hizo eco de un informe solicitado a una empresa especializada en estos parques, “no que se concluía que as afirmacións feitas polo voceiro de Somos Ribadumia eran sesgadas e incompletas, seleccionando dun texto só aquelas frases ou palabras que se adecuaban á súa intención”, consideran desde el ejecutivo, que reafirman así la legalidad del proyecto.
