Un constructor presenta demanda de desahucio contra un banco por impago de cinco meses del alquiler de un local

Cuando lo habitual escuchar que  son bancos los que solicitan la ejecución de un desalojo de una vivienda o bajo comercial por impago de hipoteca o alquiler, acaba de trascender que hay quien les va a pagar con su misma moneda. Los representantes legales de un conocido constructor de Riveira presentaron recientemente en los juzgados de la capital barbanzana una demanda de desahucio contra una entidad financiera por una supuesta falta de pago del alquiler de un bajo comercial ubicado en la intersección de la Avenida Rosalía de Castro y la Rúa de Lugo, una de las ubicaciones privilegiadas de ese casco urbano. Según pudo saber este periódico, la cantidad que se le reclama al banco es la renta de un periodo de 5 meses, en concreto, desde mayo a septiembre, y el importe de dicha cantidad es del orden de unos 10.000 euros.
El constructor prefiere mantenerse al margen de realizar cualquier tipo de declaraciones y deja todo en manos del despacho de abogados que contrató especialmente para que lleven el caso y actúen en consecuencia. Sin embargo, fuentes cercanas al mismo indicaron que se ha quedado con la boca abierta por la sorpresa que le causó al encontrarse con esa situación, pues en el más de medio siglo que lleva en el sector jamás vio algo semejante. 
En relación al local comercial que actualmente ocupa la sucursal bancaria, los riveirenses coinciden en señalar que se trata de uno de los mejor situados, muy cerca de la casa consistorial. Recordaron que antes de dar cabida a esa entidad financiera -con los consabidos cambios de denominación que experimentó-, ese bajo fue ocupado durante mucho tiempo por una tienda de ropa y otra de vestidos de moda. El constructor ya le comentó a su círculo de confianza que sólo quiere que el presunto deudor pague, cumpliendo el contrato suscrito por ambas partes. Pero, les aseguró que no tiene ganas de renovarles el mismo, ni tampoco que entre otro banco en él pues, aunque sabe que no le van a faltar ofertas, es capaz de montar allí su propia inmobiliaria.
Asimismo, señalan que les manifestó que le molesta enormemente que los poderosos abusen de los ciudadanos y que, por ello, prefiere tener allí a un pobre y honrado que a otros que sean “prepotentes y soberbios”.