Denuncian que menores acuden a unas casetas abandonadas junto la iglesia de Santa Baia para drogarse

Residentes en los alrededores de la iglesia de Santa Baia, en pleno casco urbano de Boiro, denunciaron la situación que se viene registrando desde hace mucho tiempo en que muchachos menores de edad, de entre 10 y 15 años, acuden con frecuencia a dos casetas abandonadas que hay en ese entorno -antiguamente eras usadas como cuadras- para fumar tabaco y también porros, así como a hacer botellones, con el consiguiente consumo de bebidas alcohólicas, como lo evidencia que haya botellas de cerveza tiradas por dentro de esos habitáculos. Del mismo modo, agregaron que algunas personas incluso van a dormir a esas estructuras, pues incluso colocaron colchones para tal fin.
Estos vecinos indicaron que ya avisaron en alguna ocasión a las fuerzas de seguridad y que lograron echarlos de allí, pero que regresan al lugar nada más marcharse sus agentes. Además, detallaron que de un tiempo a esta parte ya no son los mismos chiquillos, pero lo que no cambia es su corta edad. Además, conocedoras de esta situación, varias madres han expresado su preocupación por lo que está pasando y creen que es necesario que se adopten medidas contundentes para erradicar esos focos. Señalan que una caseta que usan esos menores se sitúa dentro de una propiedad privada con puerta de verja metálica sin cerradura pues, según algunos vecinos, es zona de paso para otra propiedad. Un residente apuntó que se debía cerrar con llave y que cada uno de los que tiene que hacer uso de ese camino disponga de una de ellas, para impedir el paso al resto. Algún padre indicó que ese no es el ambiente en el que les gustaría que crecieran sus hijos, pero que tampoco les pueden prohibir que salgan a la calle, donde no pueden controlar todo lo que hacen. Por ello, sostienen que las autoridades deben adoptar alguna medida que permita erradicar esos espacios.
Un vecino incluso indicó que lo que se debía hacer es derribar esa caseta abandonada y que, de ese modo, se acababa el problema. Creen que lo mismo se debería hacer con la otra que está un poco antes de llegar a la ya mencionada, pues señalaron que a esa acuden personas de edad más avanzada para inyectarse o fumar heroína. Tanto esos vecinos como algunas madres coincidieron en señalar que no son capaces de entender como no se actúa si las fuerzas del orden y las autoridades municipales son conocedoras de ese problema.
Varios vecinos que denuncian esta situación, que llegaron a calificar hasta de insalubre, indicaron que la situación se puede agravar, por lo que creen que se hace necesario actuar con la mayor celeridad posible, poniéndose en contacto con sus propietarios y actuando en consecuencia. n