Hay vida después del Arosa

Hay vida después del Arosa
Marcos Aragunde, seguidor del Arosa, y el meta del Ribadumia trabajan juntos en Fachadas Compostela

 

Marcos Aragunde “Panocha” es socio y aficionado del Arosa. De los que animan y también se muestran críticos en A Lomba en cada partido. Megáfono en mano en la grada de Preferencia, donde se sitúa el Frente Arlequín. Fue jugador de la cantera y directivo. Desde hace dos meses, su compañero de faena en el andamio es Javi Sánchez, el meta cordobés del Ribadumia que estuvo esta temporada cinco semanas en el Arosa, antes de marcharse con bastante polémica. Ambos trabajan en la empresa Fachadas Compostela. Han forjado una relación que va más allá de lo laboral y el fútbol. Son amigos, pero el domingo en el derbi de A Senra estarán enfrentados defendiendo a sus equipos. Aragunde lo hará alentando desde la grada. Sánchez bajo palos.
Dos meses después de dejar el Arosa, donde jugó tres partidos saldados con dos victorias y un empate, el meta andaluz se reencuentra con sus excompañeros el domingo. Sin cuentas pendientes. “Fue una situación complicada para mí, no le gusta a nadie como sucedió. Pero ha pasado el tiempo y estoy bien en Ribadumia. Yo no culpo a nadie del Arosa, lo que sucede dentro del vestuario no tiene nada que ver con la directiva y la afición. No le deseo nada malo al club. No soy rencoroso, el mundo del fútbol da muchas vueltas y quizá alguno vuelva a ser compañero en otro equipo. Intento comprenderlos, aunque me cuesta”. 
Sánchez cerró la puerta del primer equipo vilagarciano, pero sigue entrenando en su cantera. Al benjamín C. “Los niños fueron un gran apoyo cuando lo estaba pasando mal y me encontré un poco solo”. Se fue en desacuerdo con su suplencia y tras varios desencuentros. Pero encontró compresión en algún aficionado, como es el caso de José Manuel Ageitos. “Se portó muy bien, me propuso trabajar en su empresa y compaginarlo con el fútbol. Gracias a eso conocí a Marcos”. 
Encima del andamio, seguidor y portero no pueden evitar hablar de fútbol. “Me aprieta mucho con el tema del Arosa. Me dice que nos van a ganar y que son el mejor equipo del mundo” comenta Sánchez, “también que está deseando que vuelva”. 
En función de los resultados del domingo “los lunes son fastidiados para los dos” dice Panocha, “últimamente más para mí porque no ganamos”. El aficionado pasó de llevar a hombros a Piscis hace tres años el día del ascenso a pedir su dimisión prácticamente en cada partido en A Lomba. “Yo quiero al Arosa y quiero lo mejor para el club, critico porque creo que no está yendo bien. Por ejemplo, la actitud del vestuario y la forma de hacer las cosas del entrenador. Yo no estoy de acuerdo y no tengo ningún problema en decírselo. Hay decisiones que no entiendo y lo expreso, no me lo callo. Mucha gente lo piensa y no lo dice. De la misma forma que lo cogí en hombros en Bertamiráns le digo ahora que las formas no me gustan”.
 La marcha de Sánchez no gustó a su actual compañero de trabajo. “No lo conocía en aquel momento y no entendí su salida, pensé que era más problema del vestuario que de Javi. Ahora que veo que como persona es increíble estoy convencido de ello”. 
Arosa y Ribadumia llegan separados por 5 puntos al duelo de rivalidad, pero con trayectorias opuestas. Javi Sánchez sin embargo cree que “ellos son un equipo que deberían pelear por el play-off, tienen una gran plantilla. Nosotros somos un equipo humilde, cuyo objetivo es salvarse. La presión tiene que ser para ellos, que tienen que estar ahí arriba”. 
El aficionado arlequinado espera una reacción de su equipo. “Espero que gane el Arosa. Los jugadores supongo que saldrán como locos porque nos jugamos mucho en este partido. Estos dos años, la liga se nos acababa siempre en enero, espero que no nos metamos en problemas y que no tengamos que luchar por un objetivo que no teníamos marcado”

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