O Grove limita la implantación de más campings en suelo rústico

O Grove limita la implantación de más campings en suelo rústico
Imagen de archivo del regidor, José Antonio Cacabelos, en un Pleno municipal | Gonzalo Salgado

El alcalde de O Grove, José Antonio Cacabelos, emitió ayer un comunicado celebrando la sentencia del TSXG, que denegó el recurso interpuesto por la empresa concesionaria del Camping Paisaxe II por la denegación por parte del Concello de la licencia municipal para realizar una ampliación del establecimiento turístico en suelo rústico. 


Sobre la desestimación de otorgar la licencia al establecimiento, Cacabelos explicó que se debe a la ausencia de un plan de dotación e infraestructuras. Una tramitación que se exige desde la modificación de la Ley de Suelo de 2016 y que sirve para delimitar la capacidad de las instalaciones para ofrecer los servicios de abastecimiento de agua, saneamiento, electricidad o recogida de residuos, entre otros servicios, según aclaró el primer edil.


Asimismo, el regidor destacó que la sentencia “avala la tesis defendida por O Grove”, al señalar el “impacto paisajístico” de las instalaciones y la dificultad de asegurar abastecimientos, una situación que está “al límite” en el municipio durante la temporada estival, según alertó el socialista.


Por ello, ahora Cacabelos ya anuncia que “desde el Concello se exigirá a toda aquella actividad turística en suelo rústico la tramitación de un plan de dotación e infraestructuras”, con el objetivo de limitar la instalación de nuevos campamentos turísticos en este tipo de espacios protegidos. Como aclaración, el primer edil hizo hincapié en que “se habla de limitar, no de prohibir”, ya que el problema “está en el exceso”, debido al “aluvión de demandas para estas instalaciones, ya que, pese que en la actualidad son nueve los establecimientos de este tipo —a los que próximamente se sumara un décimo— hay once proyectos presentados para la implantación de nuevos campamentos.


Con esta nueva tramitación, el alcalde asegura que se aportará “más garantías, más seguridad y más rigor” y que exigirá una burocracia mayor y mas “farragosa” a estas entidades: Será necesaria una aprobación inicial, una exposición pública, recabar todos los informes sectoriales (no solo de la Xunta y Medio Ambiente), valorar posibles alegaciones y una aprobación provisional y definitiva. Por ello, Cacabelos subraya que se trata de una “tramitación similar, en términos más reducidos, a un Plan Xeral de Ordenación Municipal” y abre un debate sobre “el modelo turístico que queremos”


Discrepancias con la Xunta

En relación a esta situación, el alcalde aprovechó el comunicado para trasladar a la Xunta la petición de “abrir una mesa de negociación para otorgar herramientas a los concellos para limitar este tipo de establecimientos en base a los criterios que cada ayuntamiento establezca”.


Además, Cacabelos abrió un nuevo melón al anunciar las dificultades para la aprobación del nuevo centro de salud en un terreno de 7.000 metros cuadrados en As Touzas. El primer edil explicó que la Xunta habría denegado una excepción al plan de dotaciones e infraestructuras presentado para instalar un edificio de 10 metros (en vez de los 7 que se plantean en la ley inicial), para adecuarse a las condiciones que exige Sanidad. Por ello, el regidor considera que “no tiene sentido” que se exijan más tramitaciones para un edificio público que para una instalación privada y pide a la Xunta un acuerdo.

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