Valga señaliza edificios públicos con pictogramas para eliminar las “barreras” comunicativas

Las barreras arquitectónicas no son las únicas que pueden dificultar la accesibilidad a un edificio o espacio, ya sea público o privado. En ocasiones las barreras comunicativas suponen también un escollo difícil de superar. Es el caso de las personas autistas, que a menudo se encuentran con que la falta de una señalización adecuada les impiden desenvolverse con normalidad. Para atajarlo, la asociación Por Dereito —que trabaja por la integración de las personas con autismo— y el Concello de Valga han impulsado un plan para señalizar mediante pictogramas edificios públicos como la Casa Consistorial, el Auditorio, los colegios o el Centro de Día y Ocupacional para Discapacitados, que fue el primero del municipio en contar con esta señalización hace ya más de un año. Valga se convierte así en el séptimo municipio en adaptarse a las necesidades de los ciudadanos con dificultades en la comunicación, tras Cambados, A Illa, Vilanova, Ribadumia, O Grove y Teo. Vilagarcía está también en proceso.

La iniciativa fue presentada ayer en el Consistorio por el alcalde, José María Bello Maneiro; la presidenta de Por Dereito, Cuca da Silva, y la valguesa Lucía Calvo, integrante de la asociación y verdadera artífice de este avance. Su caso fue el que espoleó al Concello a colocar los pictogramas, que fueron aportados por Arasaac — Portal Aragonés de la Comunicación Aumentativa y Alternativa— de entre un abanico de más de 13.000 imágenes. “Ata que houbo un caso en Valga (de un niño con autismo) non eramos conscientes desta necesidade”, reconoció el regidor avalando la tesis de Cuca da Silva de que “o descoñecemento” es lo que impide que el uso de pictogramas esté generalizado. Estas imágenes no solo resultan útiles para los autistas, explica, sino también para cualquier otra persona “con problemas de comunicación ou lectura” e incluso ciudadanos extranjeros, para los que estos símbolos universales suponen una gran ayuda. “É un idioma internacional”, concluye Bello Maneiro.

Lucía Calvo advirtió de la “frustración que sinten as persoas que teñen problemas de comunicación”, por lo que “o feito de que conten cunha linguaxe para facerse entender é un paso moi grande”. Y en eso trabaja Por Dereito, cuya presidenta agradeció al Concello su “implicación” para hacer realidad este proyecto. Al mismo tiempo, animó a la administración local a continuar colaborando tanto por esta vía como por otras como la organización de actividades lúdicas en las que “os nenos con autismo poidan participar como calquera outro rapaz”. El alcalde se mostró abierto a colaborar “dentro das nosas posibilidades” y alabó “o traballo de persoas coma vós, que non se valora pero que é importantísimo”.