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martes | 7 mayo | 2024
Un vecino de Vilagarcía acaba de ser condenado a dos años de prisión por participar en la compra de un cargamento de droga. El caso llegó a la sección tercera de la Audiencia Nacional, a través de la investigación realizada contra los vendedores, con las que el hombre, de nacionalidad colombiana, se reunión en diversas ocasiones.
La sentencia deja en evidencia, además, los argumentos “absurdos” de la defensa. Y es que el acusado, al que la Policía Nacional realizaba un seguimiento en su vivienda de Vilagarcía, aseguró que había ido al taller que se utilizaba como tapadera para comprar un coche y que no conocía de nada al dueño, condenado en un juicio anterior.
Se da la circunstancia, y así quedó acreditado durante el juicio, que ambos, dueño y comprador, se vieron en varias ocasiones y el vecino de Vilagarcía incluso llegó a dormir en su casa durante uno de sus viajes a Pracuellos del Jarama, donde tenía el taller.
Lo que no es razonable es que se quedara a dormir en casa del vendedor, al que consta que conociera nada más que de la venta del vehículo, y que se marchara con él al día siguiente a Galicia, donde pasaron juntos dos días reuniéndose con personas relacionadas con el tráfico de drogas”, señala el alto tribunal en la sentencia, que tacha de “absurdas” las explicaciones que da el procesado.
El alijo en cuestión era de 1.303 kilos de cocaína, con una riqueza media del 69,8 por ciento. Sin embargo, la sentencia deja claro que el vecino de Vilagarcía no participó en las labores de planificación de compra del cargamento de cocaína. Además, su delito se quedaría en un intento de compra, sin que se haya podido determinar durante el juicio la cantidad que iba a adquirir, para así poder determinar su valor y calcular la multa. La Audiencia Nacional resolvió condenar al vecino de Vilagarcía a una pena de dos años y medio y el pago de las costas, así como a la inhabilitación para el sufragio pasivo. Una pena mucho menor que la que solicitaba inicialmente el ministerio público, que era de trece años de prisión y dos multas de 150 millones de euros cada una.
