La Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer, Afasal, continúa a la espera de poder disponer de las nuevas instalaciones de la Casa dos Carús. A pesar de que a finales del pasado mes de septiembre, el alcalde, Tomás Fole, y las concejalas Elena Suárez y Rocío Llovo acudieron a una entrega simbólica de llaves del inmueble al colectivo, la presidenta de Afasal, Ana Granja confirmó ayer que todavía están a la espera de que el Concello redacte el convenio en el que se detallará cómo compartirán los gastos de mantenimiento. Y es que sin la firma de este documento, el colectivo no puede disfrutar de unas instalaciones que supondrán un cambio cualitativo en los servicios que ofrecen a sus usuarios y a las familias.

En definitiva, a pesar de que en el acto de septiembre se anunció que la actividad en la Casa dos Carús comenzaría a finales del pasado año, a principios de febrero todavía no se ha llevado a cabo este propósito. Esta situación no significa que el Concello no haya avanzado en la materia, puesto que ayer mismo, la concejala responsable del área de Benestar, Elena Suárez, afirmó que en estos momentos están instalando la calefacción en el inmueble. Y es que después de más de dos años en los que la Casa dos Carús estuvo vacía, la administración local tuvo que acometer alguna que otra mejora para que Afasal pueda trasladar sus servicios a estas instalaciones.

Hay que recordar que en la actualidad el colectivo que preside Ana Granja está utilizando un bajo en las proximidades de la estación de autobuses. Por este motivo, la Casa dos Carús será una ubicación privilegiada que les permitirá separar a los enfermos que están comenzando la enfermedad de aquellos que se encuentran en una etapa más avanzada.

Afasal mantendrá en la casa dos Carús los mismos servicios que tiene en sus actuales instalaciones y hay que recordar que a ellos tendrán acceso toda la población con alzheimer de Vilagarcía, no solo los socios.

Por lo demás, como ya se indicó en el pasado mes de septiembre, Afasal no estará solo en esas instalaciones de Trabanca Badiña, sino que la intención es que otro colectivo comparta con ellos el edificio.

A este respecto, la presidenta de Afasal también indicó que todavía no se habían puesto en contacto con ellos, aunque confía en que el Concello ultime el convenio para poder firmarlo en cuestión de semanas.