La toxina remite y permite la extracción en el 44% de polígonos bateeiros en Arousa

Los buenos resultados de finales de la semana pasada en los muestreos del Intecmar se están traduciendo con la apertura de un importante número de polígonos bateeiros en la Ría de Arousa. Los últimos análisis permitieron la apertura de hasta once polígonos mejilloneros: los Riveira B y C; A Pobra H, G, A, B y D; el Cambados A2E, A1 y D; y el Grove A.
De este modo, el sector recupera poco a poco la normalidad después de dos meses en los que la toxina lipofílica les ha impedido trabajar a pleno rendimiento. De hecho, la zona de Arousa fue una de las más perjudicadas afectando incluso a los bancos marisqueros. La campaña de industria, especialmente en los cocederos, comenzarán esta semana a tomar el pulso de la actividad y dar salida a varios pedidos que mantenían estancados a la espera de que la marea roja perdiese fuerza. Cabe recordar que el Intecmar garantiza que el mejillón  que llega al emrcado está en perfecto estado. Para ello dispone de una red de muestreo para el control de las biotoxinas en viveros de cultivo compuesta por 52 puntos primarios estratégicamente escogidos entre los considerados de más rápida afectación, situados en otras tantas bateas de mejillón, con una frecuencia de muestreo variable, según las circunstancias concurrentes en lo que se refiere a los episodios tóxicos.
En esta red, las muestras se toman por alturas para posteriormente poder hacer análisis integrados o separados. La red para el control de biotoxinas se completa con 16 puntos fijos para el muestreo de mejillón de roca, con una frecuencia  mínima semanal; 20 áreas de moluscos infaunales y 16 áreas de moluscos epifaunales.