El colectivo de transportistas de la central térmica de Endesa en As Pontes (A Coruña) inició un bloqueo "indefinido" del acceso al complejo, confirmó a Efe su presidente, Manuel Bouza.
La medida de presión comenzó en la noche del jueves como acción sorpresa ante el anuncio de cierre de las instalaciones en junio. Dirigentes políticos y sindicales, las entidades empresariales de la villa o asociaciones de padres de colegios se han sumado a la iniciativa.
Bouza aseguró que el corte "no se levantará" hasta que la Xunta de Galicia, el Ministerio para la Transición Ecológica y el grupo energético se reúnan con las partes afectadas por la clausura. Así, señaló que en "casi 2 años no se ha avanzado absolutamente nada". Del mismo modo, declaró que no "hay alternativas de empleo e industriales; no hay salidas para los transportistas del carbón y los trabajadores de los auxiliares".
Además, consideró que se "acaba el tiempo" y valoró que si "las Administraciones no hacen nada, la planta cerrará en junio". "No habrá margen de maniobra", advirtió ante una posible concreción de la clausura de la térmica. Al mismo tiempo, matizó que los "trabajadores siguen igual que en el momento de la petición de cierre, no ha habido ni un solo avance".
Manuel Bouza apuntó que los concentrados carecen de "fecha para levantar la protesta" y se mostró dispuesto a "seguir cortando los accesos hasta que se sienten con los afectados" las partes implicadas.
Sobre la firma privada, estimó que se "juega al desgaste" por parte de su cúpula. Por ello, instó a la compañía a garantizar "trabajo antes de aprobar el desmantelamiento de la planta".