La postura de los empresarios que tradicionalmente instalan sus atracciones de feria en las Festas de Verán de Ribeira de no hacerlo tras conocer la decisión del Gobierno local de cambiar su emplazamiento en la zona portuaria por el Malecón y la Rúa Canarias, por considerar que es “inviable” por razones de espacio y seguridad, ha provocado que los responsables municipales hayan decidido dar un paso en otra línea. De hecho, el primer teniente de alcalde, Vicente Mariño, comunicó que esta próxima semana solicitarán una reunión urgente con Portos de Galicia para tratar de desenquistar la situación que prohibe que los cachivaches se emplacen en el lugar que lo vienen haciendo desde siempre, y que al incumplirse en 2024 trajo consigo sanciones económicas con recargo del 400%.

La publicación por parte de este periódico de que el ente portuario podría cambiar, siempre y cuando se lo soliciten, la consideración de ese espacio como zona roja, que se estableció con motivo de las obras de ampliación de los pantalanes -ya finalizadas- abre una posible vía de solución que desde el Ejecutivo ribeirense quieren explotar. Por ello, Mariño de Bricio indicó que ayer se pusieron en contacto desde el Ejecutivo ribeirense con un portavoz de los feriantes para informarle que solicitarán una reunión con Portos para solicitarle esa modificación para acabar con la prohibición de instalación de las atracciones de feria y que “actuaremos en consecuencia en función de lo que nos digan”. 

“Nuestra pretensión es desenquistar el tema, y le trasladamos a los vecinos de Ribeira que si hay un problema con las fiestas de verano por la ubicación de las atracciones de feria es culpa exclusivamente de Portos de Galicia, pues el Concello está por la labor de que las fiestas se desarrollen con total normalidad”, precisó el primer teniente de alcalde. En este sentido, el líder del PBBI sostiene que si el ente portuario les facilita el cambio de usos  “intentaremos llevarlo por ahí y puedan volver a instalarse las atracciones en las zona portuaria como vienen haciendo históricamente”. “Por parte del Ayuntamiento hay total disponibilidad para que las fiestas se celebren con total normalidad y no estamos poniendo ninguna pega”, insistió Vicente Mariño. Por último, recordó que la decisión del cambio de ubicación de las atracciones respondió a las sanciones que recibió el Concello “e non estamos disposto a eso”.