Los cabellos naturales son tendencia, pero eso muy poco preocupa a Kim Kardashian, a quien le gusta ir a contracorriente y marcar la diferencia cada vez que puede. Durante sus embarazos no se ha resistido a llevar tacones de aguja, por eso no es de extrañar que, aunque de morena esté muy favorecida, haya aparecido con el pelo rubio platino.