Las ANPA de nueve centros educativos del municipio, integradas en una Coordinadora, han tomado las riendas ante lo que consideran una “carencia” por parte de la administración. No están dispuestos a dejar que la crisis pase factura a la salud de sus hijos y el primer paso que han dado desde la creación del colectivo se visualizó ayer con la entrega de un extenso documento dirigido al Concello y a la Consellería de Educación, así como a la delegación de esta en Pontevedra, para exponerles las deficiencias detectadas en los colegios. Humedades, techos con amianto e instalaciones obsoletas, así como patios inundados e incluso extintores sin pasar la obligatoria revisión son solo algunas de las decenas de necesidades que exponen ante la administración. A esta le dan un plazo de treinta días para contestar a su escrito, ya que de lo contrario anuncian que procederán “a tomar solucións alternativas”.
Juan Carlos Ameijeiras, uno de los portavoces del colectivo, incidió en que son conscientes de que algunas de las deficiencias precisan de una importante inversión. Sin embargo, llamó la atención sobre otras que no lo precisan. Es el caso de la colocación de baldas en los armarios o poner en funcionamiento una pizarra digital.
Pero en todo caso, Ameijeiras incidió en la necesidad de priorizar para arreglar las múltiples deficiencias en colegios donde hay alumnos que, recuerda, dan gimnasia en el exterior por no poder utilizar el pabellón, donde los falsos techos se caen o donde se soportan bajas temperaturas debido a que la calefacción no es suficiente ante puertas y ventanas de hace décadas que ya no cierran bien. Llaman la atención también sobre las instalaciones eléctricas, que en algún caso por su antigüedad impiden el correcto uso de los equipos informáticos.
Teresa Moledo, otra de las portavoces del colectivo, se refirió a la respuesta que les dio la concejala de Educación, Rocío Llovo, en el último Pleno y volvió a reiterar que “non quero un columpio, pero tampouco quero colexios con falsos teitos de amianto”.
El relatorio de deficiencias detectadas por las ANPA de los centros educativos integrados en esta Coordinadora es muy amplio. En el caso del colegio de Vilaxoán, inciden en que el falso techo “caeu varias veces este curso, incluso cos nenos dentro das aulas”. Reclaman el cambio de ventanas y persianas, que tienen más de treinta años y que impiden que en invierno algún aula suba de los trece grados, incluso con la calefacción puesta. A este respecto, la caldera tampoco funciona correctamente.
O Piñeiriño es uno de los centros que mejor está. Aún así, la ANPA incide en la necesidad de instalar un ascensor o de soterrar una torreta de media tensión que está dentro del colegio. Este es uno que insta a revisar los extintores.
El Anexo A Lomba es, junto a Carril, los que piden la retirada de los falsos techos de amianto. Allí el patio se inunda, las persianas están rotas, tienen filtraciones y la fontanería tiene más de cuarenta años.