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martes | 30 abril | 2024
Si todo va bien esta misma semana se llevarán a cabo los cambios en materia de regulación de tráfico en varios puntos de Vilagarcía. Concretamente será en la calle Víctor Pita (desde los depósitos de Ferrazo hasta el muelle de Vilaxoán) y también en varias arterias del centro urbano como Alejandro Cerecedo (la calle de la Praza de Abastos) o la propia Arzobispo Lago (que pasa por delante de Bershka).
Ayer mismo operarios municipales trabajaban en la colocación de la señalización y, sobre todo, de los semáforos que regularán el tráfico rodado en puntos más delicados. Es la cuenta atrás para poner en marcha una serie de modificaciones que buscan aliviar el centro urbano de los atascos generados a raíz de la humanización de la Praza de Galicia.
Así pues los semáforos que convertirán a Víctor Pita en sentido único y alternativo (primero los coches de un lado y luego los de otro) ya están colocados y a la espera de entrar en funcionamiento. En todo caso desde la administración local se advierte que serán a modo de “prueba” y que, si no funcionan, serán retirados. Lo que se busca con esta medida es conseguir el espacio suficiente para habilitar un carril-bici que una el existente de Vilagarcía con Vilaxoán.
Lo más gordo, en el centro
Los cambios más drásticos se darán, no obstante, en el centro. Alejandro Cerecedo pasará a ser de doble sentido y su salida hacia la calle de la iglesia (Doutor Tourón) estará regulada por semáforos que ayer mismo fueron colocados.
No será la única señalización luminosa que habrá en ese entorno. El paso de peatones que une la calle Castelao con Vista Alegre también tendrá semáforos con la idea de que el tráfico sea mucho más fluido.
Hace unos días que, mediante vallas, se ha cortado ya el acceso a la Praza da Independencia por el cruce de las Franciscanas. De esta forma se busca ir habituando a los conductores a los cambios que se van a dar en esta zona una vez este céntrico enclave sea humanizado. l
