Un verano más, y ya van unos cuantos, el futuro del primer equipo de la Agrupación Deportiva Cortegada está en el aire. En la asamblea celebrada ayer la junta gestora volvió a presentar un panorama preocupante aunque garantiza “pase lo que pase” la continuidad de la base. Otra cosa es el equipo sénior de Liga Femenina 2. Su presencia en la liga depende de la aparición de un patrocinador, o en todo caso de varios. Las dos fórmulas son válidas si se reúnen entre 20 y 30 mil euros, que es lo que calculan que necesitan para salir con un equipo con mínimas garantías en la segunda competición nacional. Eso sí, que la afición se prepare para habituarse a otra rutina que la de ganar casi siempre, aunque en contraprestación podrían ver sobre el parqué de Fontecarmoa a una mayoría de jugadoras de la casa.
Los dirigentes solicitaron ayuda a la veintena de socios que asistieron a la asamblea para encontrar esos apoyos privados que deben concretarse antes de mediados del mes de junio, que es cuando deben comenzar con los trámites para inscribir el equipo.
Si finalmente no aparecen ese patrocinador o patrocinadores, el club optará por renunciar a su primer equipo, siguiendo los pasos dados en su día por el Basket Base Club, lo que dejaría a Vilagarcía húerfana de baloncesto sénior a un cierto nivel.

feel debe 57.000 euros
El motivo de los males económicos del club está en la deuda contraída por Feel, su patrocinador de la temporada que acaba de terminar. Y es que la empresa aún tiene pendiente de pago 57.000 euros (13.000 de la base y 44.000 del primer equipo), a lo que hay que sumar otras cantidades que sitúan el déficit de esta campaña en unos 70.000 euros que se suman a la deuda arrastrada, aunque están cumpliendo con la amortización prevista.
Los dirigentes mantienen negociaciones abiertas con Feel para intentar, al menos, recuperar una parte de esa cantidad total, aunque confían recibir aún todo lo pactado “porque no nos han dicho que no, aunque no nos dan plazos concretos”.
Y mientras tanto se han ido Ylenia y también Amy Syll, ambas a Zamora.