Abanca eleva sus beneficios un 10% en 2017 hasta alcanzar los 367 millones

Abanca obtuvo en 2017 un resultado neto de 367 millones de euros, un 10% más que en el ejercicio anterior. El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, el consejero delegado, Francisco Botas, y el director general financiero, Alberto de Francisco, fueron ayer los encargados de desgranar los datos de la entidad del pasado ejercicio.
El banco habla de “una mejora consistente y significativa” de los principales indicadores en materia de rentabilidad, calidad del riesgo, solvencia, liquidez y dinamismo comercial, lo que, asegura, le permite cumplir los objetivos estratégicos que se había fijado para el trienio 2014-2017.
El resultado se apoya en el incremento de los ingresos recurrentes, cuyo margen básico creció en un 17,6% y en la reducción de los activos improductivos, que pasan a representar tan solo el 2,2% del balance.
El elevado nivel de capitalización, con un ratio CET1 del 14,6% y una holgura de 1.762 millones de euros. permite también al grupo afrontar desde una posición de solidez las oportunidades del sector que puedan surgir a corto y medio plazo. Durante la presentación de estos datos, los directivos de Abanca incidieron en la sólida capacidad de generación de rentabilidad de la financiera, después de que el dato del pasado ejercicio se fijase en un 10,3%, en parte por el crecimiento de los clientes minoristas, con un aporte cada mayor a la cuenta de resultados; y de los ingresos por la prestación de servicios.
De la misma forma, también mejora la eficiencia de la entidad (hasta el 13,1 por ciento) y evoluciona acompasada a la productividad, gracias a la importante inversión en tecnología, de más de 150 millones de euros en los últimos dos años.

Créditos
El volumen total de negocio de Abanca alcanzó en 2017 los 65.556 millones de euros, de los que 27.571 millones se movieron en créditos a clientela, que crecen un 7,8 por ciento este año, un porcentaje muy por encima de la media del sector y que provoca que el banco gane cuota de mercado en este terreno.
La captación de recursos de clientes se incrementó un 6,2%, hasta 36.765 millones de euros, por el aumento de los depósitos minoristas y otros productos como fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de ahorro, que movieron 6.127 millones
Los directivos de Abanca pusieron el foco en la mejora de la calidad del riesgo, ya que se prolonga por 14 trimestres consecutivos la reducción de activos dudosos y la morosidad desciende un 31%, hasta situarse en un 4,7%, 260 puntos básicos por debajo de la media española; lo que sitúa a la entidad gallega como la “segunda entidad española con mejor calidad del activo” tras la venta de 1.900 millones en activos improductivos y con un coste del riesgo de tan solo 0,22%. Abanca reiteró que apuesta por lo digital, ya que se han comprometido 100 millones adicionales a esta faceta.
Los objetivos para el próximo trienio pasan por mantener CET1 superior al 13%, hacer descender la morosidad a menos del 3% y superar la cifra de los 30.000 millones de euros en crédito.