Jarro de agua fría para un Arosa que ya saboreaba los tres puntos

En otro final de infarto el Arosa se quedó sin dos puntos al empatar ayer en A Lomba ante el Silva. Suso hizo el 2-1 que parecía el tanto del triunfo local en el minuto 88, pero en el tiempo de prolongación los coruñeses empataron. Son 9 ya los goles encajados por el Arosa en los últimos partidos, que siguen demostrando su falta de solvencia. Si bien ayer tuvo mucho que ver en ello la calidad del coruñes Marcos Gómez, que hizo un golazo de falta directa y otra genialidad en el segundo tanto del Silva. Para el equipo de Rafa Sáez, sobre todo por los buenos minutos de juego mostrados en el último cuarto de hora, fue todo un jarro de agua fría. Esta vez el final de cara o cruz no fue favorable.

Dijo Javi Bardanca, técnico del Silva, los días antes del partido que en esta categoría es clave aprovechar los errores del rival. Eso fue lo que hizo el Arosa en la primera parte para ponerse por delante. Le bastó un disparo a puerta entre los tres palos, el único en el primer tiempo, para hacer el 1-0. Fue al filo del descanso, en una indecisión del central Miguel Aréjula, que hizo un mal despeje y el juvenil Raúl batió por arriba al portero Damián, a media salida. El joven caldense de 17 años vuelve a marcar en su segundo partido como titular. Ayer volvió a ser de lo mejor del equipo, incansable, e incluso estuvo cerca de hacer un doblete en la segunda parte.

El 1-0 al descanso fue la mejor noticia para el Arosa porque lo cierto es que le costó mucho meterle mano a un correoso Silva. Los coruñeses empezaron mejor, mandando y jugando en campo contrario. Dieron dos avisos, ambos de Iván. El primero en una falta lateral, recibió solo en el segundo palo y con poco ángulo optó por el remate, que salvó Táboas con el pie. El segundo en una indecisión del portero local, pero Iván se quedó sin campo para poder rematar.

Bastantes minutos le costó al Arosa tener un poco de continuidad en su juego, mediado el primer tiempo empezó a lograrlo. Si bien, Pedro Beda estaba aislado en ataque y Róber infrautilizado en banda derecha. Poco se le vio a Jorge Sáez, que sin embargo fue el que tuvo la primera ocasión local en una volea que se fue alta. El dominio del Arosa se tradujo en que se fuese volcando cada vez más, dejando espacios para contragolpear al Silva. Marcos Gómez remató flojo desde la frontal y a la manos de Táboas tras una galopada de Íker en el 32.

Cuando parecía que se iba a llegar al descanso con empate sin goles, en un balón sin peligro sobre la frontal del área visitante, se produjo la indecisión en el despeje del central Miguel y el balón le cayó a Raúl para poner al Arosa con viento a favor.

El Arosa empezó mucho mejor en el segundo tiempo ante un Silva que bajó enteros. Los locales tuvieron dos opciones para el 2-0. La primera en una acción de Jorge Sáez por la izquierda que remató de tacón Raúl, el juvenil estuvo a punto de hacer un golazo pero el balón se fue por poco. La segunda en una gran acción de Pedro Beda, que asistió a Raúl, cuyo remate salvó Damián.

En el minuto 62 el técnico visitante Javi Bardanca introdujo un doble cambio, dando a entrada a David y Souto. El partido cambió por completo. El Silva subió prestaciones, metió al Arosa en su campo y comenzó a encadenar llegadas hasta que Marcos Gómez empató con un golazo de falta por toda la escuadra. Quedaban veinte minutos y el Arosa era incapaz de echar el candado otra semana más.
El equipo de Vilagarcía reaccionó rápido y rozó el 2-1 en una maniobra de Beda en mediocampo, que dejó en el mano a mano a Jorge Sáez, el madrileño regateó a Damián pero llegó el lateral Lema para impedir su remate a puerta vacía.

El que movió ficha entonces fue Rafa Sáez, metió a Javi Otero y Cissoko, con lo que Pedro Beda retrasó su posición a segundo punta. Desde ahí generó un caudal ofensivo enorme. Fue una exhibición de claridad de ideas, no siempre acompañada por sus compañeros.

Llegaron entonces los mejores minutos del Arosa en A Lomba, que hicieron despertar a su público.  Adrián Gómez estuvo cerca del gol en un disparo desde la frontal que despejó Damián. En el 88 llegó el 2-1, en un córner, el balón quedó suelto en área pequeña y Suso batió a Damián. Parecía el tanto del triunfo, pero el Silva aún tuvo algo que decir en el partido. En el 92, tras un centro lateral que despejó de puños Táboas, Marcos Gómez remató de primera desde treinta metros, el balón se estrelló en el larguero y Jonatan marcó de cabeza a placer. Los locales quedaron hundidos, como el banquillo visitante, golpeado con fuerza en la celebración por los jugadores del Silva.