Habíamos tenido un aviso y una marcha atrás, pero todo apunta a que ahora sí: los viajeros recurrentes del tren tendrán que reservar un mínimo de cien euros mensuales para desplazarse, por ejemplo, de A Coruña a Santiago. Los abonos gratuitos se despiden en junio. Acostumbrarse a lo bueno es fácil y volver a la cruda realidad va a costar mucho más que adaptarse al horario de verano.