El CJ Cambados no podrá contar con uno de sus puntales la próxima temporada en Tercera RFEF.  José María Pérez-Batallón "Bata"  deja el equipo por incompatibilidad laboral. El defensa vilagarciano de 26 años se marcha en septiembre a Madrid cursar un máster que le tendrá, como mínimo, año y medio ocupado en la capital de España. 

Farmacéutico de formación y profesión, Bata inicia una nueva etapa profesional que ya tenía programada desde hace tiempo.  "En enero decidí que me iba a lanzar a hacerlo de una vez y eso incluye dejar el Cambados", lamenta porque no podrá jugar en Tercera. "Hace un par de meses me empecé a oler que íbamos a ascender y que esto me iba a fastidiar el doble", dice contrariado pero también con buen humor. "Mi idea es seguir entrenando por allí en algún equipo, pero no jugar en una liga federada".

Bata llevaba siete temporadas en el CJ Cambados, a donde llegó procedente del Arosa tras haber jugado en Tercera. En Burgáns se convirtió en un fijo y una pieza clave para Edu Charlín y Pénjamo. Su crecimiento deportivo ha ido a la par con la evolución del CJ Cambados, culminada el domingo con el regreso a Tercera 27 años después. 

Al igual que ocurre con la retirada de Roberto Pazos, con la marcha de Bata el Cambados pierde mucho más que un central solvente con un extraordinario juego áreo. También a un líder muy difícil de reemplazar. "Siempre ha estado muy a gusto en Cambados, por eso no me planteé otras ofertas. El grupo humano es muy bueno y todo es muy profesional". Bata no podrá medir su progresión a sus 26 años en la nueva categoría, algo que le genera cierta pena. "Siempre está ahí esa duda de si tengo nivel para volver a Tercera, ya que no acababan de llegar ofertas, y esta era una buena oportunidad y hubiera estado encantado, pero las cosas se dieron así".

Para Bata la clave del éxito del CJ Cambados, más allá del funcionamiento colectivo por encima de las individualidades,estuvo en que "este año conseguimos ser un equipo fuerte en defensa y ganamos partidos difíciles". Al vilagarciano no se le olvidará nunca el último mes. "Fue butal. Desde la final de Copa en Pasarón pese a perderla, a como vivió la gente las eliminatorias contra el Negreira y Beluso, con ambientazos en Burgáns y arropándonos en los desplazamientos. Fue todo increíble, con todo el pueblo y el alcalde volcados y la fiesta que hicimos".

Bata se marcha pero estará "muy pendiente" de lo que haga la próxima temporada el Cambados, donde deja amigos. "Siempre que pueda venir a Galicia, iré a Burgáns". Será un aficionado más para empujar desde la grada.