16º-21º
domingo | 12 mayo | 2024
El Cortegada se ha metido en un lío. La derrota ayer en Avilés ante el ADBA, su máximo rival en la pelea por la permanencia, deja al equipo de Rubén Domímguez en una situación de alerta con la amenaza del descenso deportivo muy presente. La de ayer fue la novena derrota seguida del equipo vilagarciano, que no levanta cabeza en el nuevo año desde que se marchó la norteamericana Tyra Jones. De nada sirvió el gran partido que volvió a firmar Cris Loureiro (28 puntos), al menos el Cortegada conserva el average, lo que le da un cierto margen todavía a falta de cinco jornadas que se presumen de infarto.
No empezó mal el partido el Cortegada, pero los triples de Jone Azkue, Deangelique Waithe y Marcia Guimaraes dieron la iniciativa en el marcador para ya no dejarla a las locales, que encontraron en la alero vasca a su faro en ataque. Fue en el último minuto del primer cuarto cuando el ADBA abrió brecha con un parcial de 6-0 (23-16). Al inicio del segundo cuarto Cris Loureiro consiguió que la diferencia, que llegó a ser de 10 puntos (30-20) no siguiese aumentado. Mediado el cuarto Rubén Domínguez paró el partido para ordenar el juego de su equipo. Las avilesinas llegaron a ponerse 12 arriba, Zeltia Presas y Patri Vicente redujeron la desventaja a la mitad con sus puntos ya en la parte del final del cuarto, pero Laura Chahrour a base de tiros libres y Jone Azkue, desatada (17 puntos en la primera parte y 15 en la segunda) mantuvieron el partido en el intermedio a favor del penúltimo clasificado, que empezó a soñar con remontar también el average de 18 puntos.
El Cortegada empezó bien el tercer cuarto, con Cristina Loureiro tirando del carro en ataque, secundada por una Patri Vicente que cometió su tercera falta, y con la serbia Lukovic anotando sus primeros puntos en el partido. El marcador se apretó 51-50 con un triple de Loureiro, por lo que el técnico pontevedrés de las locales, Iván Villaverde, tuvo que pedir tiempo. Cuando todavía restaban más de trece minutos de partido Patri Vicente cometió su cuarta falta, en ataque, que la llevó al banquillo. El cuarto triple sin fallo en el partido de Jone Azkue puso 7 arriba a las locales, obligando a Rubén Domínguez a parar el partido. El duelo se había convertido en un toma y daca entre Jone Azkue y Cris Loureiro, hasta que Nuria Chorén metió un triple importante que permitió al Cortegada iniciar el último cuarto solo 5 abajo (66-61).
A falta de siete minutos y 9 abajo las visitantes volvió a pista Patri Vicente. El desacierto hizo mella en ambos equipos, con tiros fallados y pérdidas de balón. El Cortegada entró en los últimos minutos 5 abajo (76-71), perdió potr faltas a Vicente y vio como el triple de Marcia Guimaraes elevó la desventaja a 9, que ya fue insalvable.
El Cortegada volverá a jugar fuera el sábado, ante el Leganés, que es quinto.
