Vidas cruzadas en un derbi inédito

Villalonga y Ribadumia, dos clubes con más de medio siglo de existencia, se enfrentan el domingo por primera vez en categoría nacional. En los banquillos, dos personas con vidas deportivas que se han ido cruzando a lo largo de los años. Antonio Fernández y David Sierra compartieron vestuarios, aulas y en la actualidad campos de fútbol de Tercera y de cantera.
En el año 2002, Fernández y Sierra fueron compañeros de equipo en el Villarrobledo. Un club de Albacete que en su tentativa de jugar el play-off a Segunda B se reforzó con jugadores llegados desde distintas partes de España. El entrenador del Villalonga iniciaba así una larga etapa de 8 años lejos de Galicia tras dejar el Xove Lago. “Era un equipo con miras de subir. Teníamos un entrenador asturiano, Jose Antonio Fernández, que realmente me marcó, practicábamos un fútbol combinativo pero quedamos quintos y no nos metimos”, explica. El técnico del Ribadumia llegó a Albacete iniciada la temporada. “Lo que más recuerdo son las instalaciones, tenían un estadio precioso. Fue una pena, éramos un buen equipo, de play-off sin duda”.
Hace 14 años, el conjunto manchego en el que jugaba Sierra empleaba el ofensivo dibujo 4-3-3 que tanto gusta al pontevedrés. “Antonio jugaba de interior, de 8, y yo de extremo, de 11”. David elogia las cualidades como futbolista del técnico que tendrá enfrente en San Pedro en poco más de 48 horas. “Era muy buen jugador, muy profesional, técnicamente muy bueno, dominaba bien el espacio, hacía goles y tenía buen golpeo”.

juntos en pasarón
Una década después de disfrutarlo como compañero, Sierra, como ayudante de Milo Abelleira, tuvo a Fernández a sus órdenes en el Pontevedra. Fue en la temporada 2012-2013 en Tercera División. “Él entrenaba al filial y asumió responsabilidades en el primer equipo”, recuerda Antonio. “Tenía buena relación con los futbolistas, al igual que el preparador físico Fran Carrillo”.
La tercera vez que sus caminos deportivos se cruzaron fue cursando el título de entrenador nacional. A su larga experiencia como futbolistas “buscavidas” ambos sumaron la calificación para convertirse en entrenadores jóvenes, ambiciosos y conocedores de todo lo que pasa en un vestuario. “Yo no me quejo, he empezado bien”, dice Antonio, que colgó las botas hace menos de dos años para sentarse en el banquillo de San Pedro. “Pero hay que trabajar para ello, en el mundo del fútbol nadie te regala nada. Además hay mucha competencia”.
Antonio y David son asiduos los últimos años del “Don José”, un bar en Pontevedra al lado del Estadio de la Juventud que regentan familiares de Fran Carrillo, preparador físico del Ribadumia. Allí comparten charlas futboleras mientras degustan callos y pulpo los sábados por la mañana. “Este año ya voy menos, el pasado lo tenía como ritual cada vez que ganábamos”, bromea Antonio. La relación entre ambos abrió esta temporada un nuevo capítulo. El técnico del Villalonga aceptó la propuesta de Rafa Sáez para entrenar en la cantera del Portero 2000. Forma e instruye al equipo benjamín de primer año, en el que juega Bruno Sierra, el hijo mayor de David. “Tiene muy buenas condiciones, se le ven cosas diferentes a los demás”, dice su entrenador. “¿El comportamiento del padre? Pues es ejemplar, no me dice nada, va a todos los entrenos y sabe estar en su sitio”.

un partido sin favorito
Sobre el partido, Sierra explica que “aunque somos amigos, durante 90 minutos seremos rivales y cada uno defenderá los intereses de su equipo”. Antonio considera que “entre las plantillas hay diferencia, solo hay que ver los partidos que tienen en Tercera los jugadores de ambos equipos”, pero no cree que haya favorito en el derbi. “Ellos intentan vender que se tienen que salvar y me parece correcto, pero eso lo tendríamos que decir nosotros, con la plantilla que tienen siempre pueden aspirar a más”.
El técnico visitante se refiere a la trayectoria de los clubes. “El Ribadumia está empezando a construir su historia en categoría nacional y el Villalonga es ya un clásico que ha jugado play-offs, por situaciones coyunturales  pasó por momentos complicados pero ya esta de vuelta”. Sierra alaba la solvencia defensiva de los celestes. “El año pasado fueron uno de loss equipos de España con menos goles encajados y mantienen el bloque. Además históricamente San Pedro es un campo donde el equipo local se comporta como un rival muy difícil”.