Un hombre de 56 años fue restacado esta media tarde del interior de un pozo de agua que hay en una finca particular sin vivienda -sólo tiene una zona para barbacoa, en el lugar de Sego, en la parroquia ribeirense de Artes, y al que había caído cuando, al parecer, intentaba realizar tareas de mantenimiento y limpieza. Fue pasadas las las seis y media de la tarde cuando un particular contactó con el Centro Integrado de Atención ás Emerxencias 112 Galicia paraa informar que hacía un momento en que escuchó a una persona pedir auxilio y que al acercarse al lugar de donde procedían las voces pudo comprobar que era un hombre que se precipitó al interior de un pozo de unos ocho metros de profundidad.
Según pudo saber este periódico, el hombre estaba limpiando el pozo y al introducir los pies cayó dentro del referido orificio. Al parecer, el hombre llevaba dentro del pozo desde las tres de la tarde y el agua le cubría a la altura del pecho. Pese a que estuvo gritando para pedir ayuda durante mucho tiempo, nadie le pudo escuchar, lo cual se debió a que la finca donde ocurrieron los hechos se encuentra alejada de las zonas de viviendas y de la carretera. Cuando la víctima ya se veía pasando la noche en ese sitio, sus gritos desesperados fueron escuchados. Tras el aviso del alertante para solicitaar medios de rescate, hasta el lugar se movilizaron una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB) de Urxencias Sanitarias de Galicia-061, patrullas de las Policías Local y Nacional, efectivos del Grupo de Apoio e Emerxencias Municipal y la dotacción de guardia del parque comarcal de Bomberos de Ribeira, así como a sus compañeros de Boiro.
Fueroin estos últimos profesionales pertenecientes al Consorcio Provincial Contraincendios e Salvamento da Coruña con base en la capitl barbanzana los que colocaron una escalera de mano con ganchos, que tiene una altura de cuatro metros, y la introdujeron en el poz, con la que el hombre accidentado pudo salir al exterior con la ayuda de los equipos de emergencias. Aunque el hombre aparentemente estaba bien y hablaba con normalidad, se decidió su evacuación en ambulancia al servicio de Urxencias del Hospital do Barbanza, pues estaba mojado y se sospechaba que pudiera tener síntomas de hipotermia, adema´s de que estaba nervioso y ligeramente acelerado por lo que acababa de sucederle.