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miércoles | 8 mayo | 2024
Ayer fue el turno de Meis y O Grove en la ronda de visitas que la nueva delegada de la Xunta en Pontevedra, Luisa Piñeiro, está realizando para recoger las inquietudes de los concellos. En este caso se llevó por lo menos una veintena de peticiones, entre ellas algunas históricas y “urxentes”, según sus alcaldes, como nuevos centros de salud, un puerto deportivo, la tubería de agua, así como atender las carencias en la atención primaria y restablecer servicios afectados por el protocolo de la pandemia. El grovense, Jose Cacabelos, deseó que con Piñeiro, la “interlocución sexa máis efectiva que ata o de agora” y la delegada se comprometió a realizar gestiones para ver las posibilidades de cumplirlas, aunque, en todo caso, aseguró, que hay “máxima colaboración e total dispoñibilidade”, especialmente en temas Covid.
“Gran compromiso”
Así lo indicó en un comunicado posterior a la reuniones mantenidas con Cacabelos y Marta Giráldez en el que también repasa gastos realizados por la Xunta en los últimos tiempos como ejemplo de su “gran compromiso”. Al listado suma casi 24 millones en la última legislatura especialmente para el sector del mar, sobre todo en O Grove con 4,6 millones para acuicultura, transformación y comercialización. O los 3,3 millones destinados a las parcelarias de Meis y los 2,9 para mayores y educación, siendo el CPI de Mosteiro uno de los primeros en someterse al plan de rehabilitación energética (600.000 euros).
Pero lo cierto es que O Grove acumula demandas muy concretas desde hace tiempo y el Concello ya se quejó de su ausencia en los Orzamentos para 2021 pues son cuestiones de competencia autonómica y algunas “levan sobre a mesa incluso anos e se teñen convertido en históricas e urxentes”, señaló su regidor.
Este empezó por la necesidad de sustituir la vieja tubería de abastecimiento, la única vía de entrada de agua, y siguió con el desdoble del tramo de Vía Rápida, la inclusión de O Grove en el área metropolitana de transporte de Pontevedra, aunque apuesta por un área saliniense; la reforma integral de la PO-317 (A Lanzada- San Vicente); mejoras en Luís Antonio Mestre, Teniente Domínguez y Xoán XXIII, “onde queda pendente a instalación de lombos redutores”; la “necesaria” ampliación de Meloxo, sobre todo para el sector bateeiro; una reforma integral de O Corgo con un nuevo dique y la transformación del puerto marinero en uno deportivo; la desafección de terrenos y la “urxente” reforma de la explanada, que “está en situación precaria”. Y en el ámbito cultural, la declaración de zona protegida para el ámbito histórico comprendido entre Carreira y Area Grande, además del prometido acondicionamiento de Adro Vello.
Proyectos pendientes
En Meis también echaron en falta partidas y ayer se lo recordaron a la delegada. Un nuevo centro de salud, la habilitación de un paseo seguro en el CPI Mosteiro para evitar la coincidencia de peatones y autobuses; un mayor esfuerzo económico para las parcelarias; mejoras de alumbrado y seguridad en la PO-531; la renovación del antiquísimo coche de Protección Civil, tema sobre el que se polemizó por la puntuación obtenida en la convocatoria de ayudas, y mejoras en los colegios, sobre todo en el de A Armenteira, que “necesita unha actuación no tellado e nas ventás, que son moi vellas”, apuntó la alcaldesa. Al igual que Cacabelos pidió la cobertura de las frecuentes ausencias de médicos e información sobre el futuro de Pediatría y el consultorio de Paradela, así como de la posibilidad de integrar la guardería en el Consorcio.
