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jueves | 18 abril | 2024
El agua que se esperaba para un consumo de dos o tres días se esfumó en cuestión de menos de doce horas. Ocurrió en el lugar de Nogueiró de Arriba, en Meis, en cuyo Ayuntamiento no salen de su asombro. En una sola noche, este núcleo poblacional vació tres depósitos de 5.000 litros cada uno.
La situación, en plena prealerta por sequía, ha llevado al Concello a emitir ayer un bando de urgencia, en el que señalan lo que directamente califican de “uso irresponsable” del agua.
La alcaldesa, Marta Giráldez, explicaba los detalles de lo ocurrido, al ser preguntada por este asunto. El núcleo poblacional en cuestión bebe de la traída general, pero se han detectado obstrucciones causadas por raíces que es necesario reparar. En previsión de dos o tres días de trabajos en las tuberías, el Concello optó por llenar tres depósitos existentes, de 5.000 litros de capacidad cada uno, de los que iría tirando el consumo de Nogueiró de Arriba mientras durasen las reparaciones en las otras conducciones. Ese llenado se realizó a última hora de la tarde del miércoles. A las 7 de la mañana del jueves, ya no quedaba agua.
Ante tal situación, en el bando advertían que las viviendas de Nogueiró de Arriba “quedarán sen auga dende hoxe (por ayer), ou de haber algunha sairá probablemente turbia”. Por ello, recomiendan que “non se utilice para beber”.
La alcaldesa confirmaba horas después que el Concello había conseguido contratar un nuevo llenado de los depósitos. Pero el mensaje es claro: “Seguimos en unha situación de prealerta por escaseza de auga”.
Sin ser una situación de “alarma”, Giráldez insiste en que los niveles siguen bajando, no hay previsión de lluvia y septiembre “pode ser un mes moi complicado”. “Hai que ser conscientes de que o que estamos a pedir, un consumo responsable, non o pedimos por que estea de moda, senón pola situación de prealerta”.
En el bando, el Ayuntamiento recuerda que no se debe usar el agua para “encher piscinas, nin para regar, nin para baldeos, nin para lavar o coche”. También recomiendan revisar la instalación doméstica, para evitar fugas.
La situación de sequía ya había provocado problemas en otros puntos de Meis, desde hace semanas. Es el caso de A Moroza, en donde ya a mediados de julio se cortó el agua entre las 22:30 y las 8 horas. La noche era tiempo suficiente para que el depósito regenerase el agua, garantizando el suministro a la población durante el día. Pero ese corte nocturno por sí solo no basta ya ahora para que se llene, explicó ayer Giráldez. Por ello, el Concello se ha visto obligado también a contratar su llenado con camiones. La situación es, pues, delicada.
