9º-15º
sábado | 27 abril | 2024
La Audiencia Provincial de Pontevedra ha tenido que volver a suspender el juicio contra José Ramón “Nené” Barral, exalcalde de Ribadumia, y la supuesta red de una decena de personas a la que la Fiscalía atribuye la presunta comisión de delitos de contrabando continuado —de tabaco—, cohecho y asociación ilícita. La sesión estaba prevista para mañana martes, pero según fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) se aplaza por la coincidencia de señalamientos preferentes (causas con preso) de algunos de los abogados. Ya sucedió el pasado mes de diciembre y por el mismo motivo.
Cabe recordar que el Ministerio Público pide un total de diez años y medio de prisión para el exalcalde, además de una multa de quince millones de euros. Para otros acusados también solicita penas de prisión y multas millonarias.
La causa, con más de veinte años en instrucción, es una de las que más se han dilatado en España. En septiembre abrió el proceso de vista oral, aunque aquella jornada se dedicó al planteamiento de cuestiones previas por parte de las defensas de los acusados. El tribunal señaló diciembre para contestarlas y, en su caso, continuar el juicio, pero entonces la Audiencia tuvo que posponer la cita, para atender procesos judiciales más urgentes, con presencia de detenidos.
Las cuestiones previas fueron planteadas en una jornada en la que los acusados no tomaron la palabra. Las defensas intentaron entonces presentar argumentos jurídicos para tumbar la causa y consiguieron un gran paso, al aceptarse la anulación de las escuchas telefónicas.
Así, entre otros aspectos, plantearon la prescripción de los delitos y que la investigación e instrucción estuvieron plagadas de “errores” y “subterfugios”, como escuchas prospectivas. Después trascendía que el tribunal estimaba las alegaciones que planteaban la anulación de los pinchazos telefónicos y del resto de evidencias conseguidas con ellas, con lo que decae una de las principales pruebas de cargo que armaban el caso.
