La conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, subrayó ayer el apoyo de la Xunta de Galicia al sector vitivinícola gallego, que cuenta con más de 10.000 profesionales y casi 450 bodegas que elaboran vino bajo algunos de los cinco sellos de denominación de origen o indicación geográfica protegida. Lo hizo durante una visita a la bodega Palacio de Fefiñanes, de la DO Rías Baixas, en Cambados, que produce y comercializa una media de 175.000 botellas al año, de las que aproximadamente el 50% tiene como destino la exportación a unos 25 países.

La conselleira recordó que la Xunta, a través del Instituto Económico de Galicia (Igape), convocó en 2023 y 2024 un programa de ayudas para financiar la adquisición de uva por parte de las bodegas gallegas por importe de 2 millones de euros. En total, las dos convocatorias suman 67 solicitudes, la mayoría, en la provincia de Pontevedra con 38.

La conselleira hizo hincapié en su visita en la voluntad del gobierno gallego de fomentar la modernización, internacionalización y sostenibilidad, con medidas concretas para favorecer la competitividad del sector, que sirve también como embajador del destino Galicia.

Un sector que ha recabado un gran apoyo de las administraciones tras la incertidumbre surgida por el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Y es que la Denominación de Orixe Rías Baixas exportó en 2024 cerca de tres millones de litros a este país, generando unos ingresos de 23,4 millones de euros. De hecho, la Xunta de Galicia acordó con los Consellos Reguladores una nueva línea de préstamos flexibles, dotada con 50 millones, para aliviar las incertezas que afectan al sector vitivinícola gallego.