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domingo | 28 abril | 2024
Encina López, especialista en odontología pediátrica, respondió esta semana a las preguntas de los lectores a través de la sección Tu Especialista Responde. La sonrisa de los más pequeños es el enfoque principal de la doctora Encina López, una experta en el campo de la Odontología Integrada Pediátrica. Su compromiso con la salud bucal infantil ha transformado la experiencia dental para los niños en las Clínicas Dentales Ortodix. Descubre cómo su enfoque innovador y su dedicación están cambiando la forma en que los niños ven la visita al dentista.
¿Qué tipo de alimentos deben evitarse para que los niños tengan una buena salud bucodental?
Principalmente alimentos azucarados y ácidos. Alimentos que contengan azúcares procesados, ya sean azúcares añadidos como los que encontramos en las chuches pero también en alimentos que podríamos pensar que no contienen azúcar como el pan de molde o los azúcares que proceden de la modificación de un alimento que contenga azúcares naturales como pueden ser los zumos. Lo mejor sería consumir la fruta directamente.
También hay que tener en cuenta la consistencia del alimento, pues los alimentos con una consistencia más pegajosa permanecen más tiempo pegado a la superficie del diente por lo que serán más difíciles de eliminar.
¿A qué edad se debe hacer la primera consulta?
Hasta hace unos años se creía que se debía realizar a partir de los 3 años, pues es cuando se completa la dentición primaria. Sin embargo, los estudios nos muestran que a esa edad ya es tarde para acudir a revisar la boca. Deberíamos llevar a nuestros hijos al odontopediatra desde la salida de los primeros dientes, incluso antes, para instaurar hábitos de prevención desde el primer momento.
No se debería retrasar la primera consulta por el miedo al llanto del bebé pues la prevención es la mayor aliada para lograr adultos con bocas sanas.
Incluso durante el embarazo es una buena época para consultar sobre cuidados orales para estar preparados para el momento en el que sea necesario comenzar a cuidar la boca del bebé.
¿Cuál es el impacto de los chupetes y los hábitos de succión del pulgar en el desarrollo dental de los niños?
Los hábitos orales perjudiciales son aquellos que ejercen fuerza sobre los arcos dentarios y tejidos blandos entre los cuales tenemos la succión digital y el uso prolongado del chupete.
El grado de las alteraciones producidas dependerá de la duración, intensidad y frecuencia con la que el niño lo haga. Los hábitos relacionados con la succión suelen considerarse reacciones automáticas que pueden manifestarse en momentos de estrés, frustración, fatiga o aburrimiento.
La duración del hábito es importante. Las consecuencias de éstos provocarán deformaciones dentofaciales y maloclusiones. Si el uso del chupete se elimina antes de los dos años de edad los efectos producidos son mínimos y se corrigen espontáneamente.
La succión digital es más complicada de eliminar, se debe conversar con el niño explicando los efectos adversos, existen mecanismos físicos y aparatos para conseguir abandonar el hábito. La frecuencia con que se realizan durante el día y la noche, también afecta el resultado final. Los efectos lógicamente serán menores en un niño que se chupe el dedo de forma esporádica que en otro que tenga el dedo en la boca de manera continua. La intensidad del hábito es otro factor que hay que tener en cuenta.
¿Cuáles son los métodos más efectivos para enseñar a los niños a cuidar sus dientes en casa?
El juego es la mejor herramienta para motivar a los niños. Algunos consejos:
utiliza una música que le guste para controlar la duración del cepillado o utiliza un reloj de arena. Cómprale un cepillo de colores o de sus personajes favoritos.
Convierte ese momento en agradable y no en un castigo. Motívalo con cuentos relacionados con los dientes.
¿Qué opciones hay para proteger los dientes de leche?
Visitar al odontopediatra desde la salida del primer diente para que te pueda orientar sobre los cuidados de la boca del pequeño, para revisar la boca y detectar hábitos higiénicos y dietéticos perjudiciales para la boca del bebé.
Cepillado desde la salida del primer diente con pasta fluorada y cepillo de cerdas de nylon instaurando un hábito desde muy pequeños para conseguir un adulto con una boca sana.
¿Qué consejos le darías a unos padres para que mantengan una rutina dental saludable en sus hijos?
Acudir al odontopediatra periódicamente a modo de prevención para evitar tener que hacer tratamientos reparadores. Cepillarles nosotros mismos los dientes mientras sean pequeños pues es responsabilidad de cada padre. De la misma manera que se le cambian los pañales a un bebé , es un adulto quien debe cepillarle los dientes a los niños aunque dejemos que el niño se cepille él también a mayores.
El éxito de un buen cepillado en el niño va a depender del adulto que lo realice.
Hasta por lo menos los 8 años el cepillado debe ser supervisado por los padres o quien nos ayude a cuidar al niño. Aunque dejemos que el bebé juegue con el cepillo nunca lo consideraremos un cepillado, éste siempre debe ser realizado por un adulto.
Hábitos dietéticos saludables. No solo las chuches producen caries, identificar alimentos con azúcares añadidos o libres para no incluirlos en la dieta. El consumo diario de azúcares malos es un riesgo elevado asociado a la caries por la frecuencia de ingesta.
¿Por qué se recomienda usar flúor?
Disminuye la aparición de caries porque hace al esmalte más resistente a los ácidos. Se ha demostrado en muchos estudios científicos que es la manera más efectiva y segura para prevenir la caries.
Desde que erupciona el primer diente se debe realizar cepillado con pasta fluorada de 1000-1500ppmF, en menores de 3 años la cantidad será de un grano de arroz y mayores de 3 años la de un guisante.
¿Qué tipo de cepillo es el más recomendado para los más pequeños de la casa?
Como el cepillado es responsabilidad de los padres y madres mientras son pequeños, lo ideal es un cepillo que tenga un mango lo suficientemente amplio para conseguir un buen manejo por parte del que le esté haciendo el cepillado, a poder ser engomado para mejor sujección, cabezal pequeño y ancho con cerdas de nylon. Los dedales de silicona no son aptos para el cepillado pues no arrastran la placa bacteriana.
Hasta los 6 años el cepillado lo debe realizar un adulto y hasta los 8 años supervisamos y si es necesario le ayudamos.
