El PP de Caldas presentará alegaciones al proyecto de la Variante Oeste al considerar que la alternativa preferida provoca una gran afectación en el territorio, con el derribo de cuatro viviendas. Los populares piden que el plazo de exposición pública – que termina el lunes 1– se amplíe al detectar nerviosismo y preocupación entre los vecinos. Los populares consideran que la ejecución de la vía de alta capacidad causaría “estragos” en las parroquias de Santa María y Godos y también en Saiar y Bemil, estas últimas en menor medida. Los conservadores señalan que los vecinos están “moi preocupados e moi nerviosos, con toda a razón do mundo, porque están totalmente abandonados polo goberno local PSOE-BNG e porque o Goberno está tentando colar este estudo e estes trazados pola porta de atrás”.

De hecho el PP habla de “postura escurantista” y de “absoluta deixadez de funcións” por parte del ejecutivo local. “Nin está a respaldar aos veciños nunha clara postura de apoio ao Goberno para sacar adiante un proxecto que fende ao noso concello”, advierten los populares. Creen que las reuniones informativas deberían haber sido convocadas las primeras semanas y en todas las parroquias. 

De hecho advierte el popular que hay vecinos que se están reuniendo por su cuenta para intentar buscar soluciones a este problema. Para el portavoz del PP, Fernando Pérez, “o goberno local estase desatendendo por completo nun claro sinal de abandono de Caldas e aos seus veciños e ata na reunión en Arcos con presenza do alcalde, o presidente da entidade local menor, tamén do PSOE, afeoulle que ocultara toda a información nun tema de tanto calado”.

El PP asegura que va a “defender aos veciños ata as últimas consecuencias” y apela a un frente común con representantes de los concellos de Vilagarcía y Portas, también afectados.