La comunidad educativa del CEIP San Clemente (en Caldas) sigue en pie de guerra. De ahí que aprovechasen la celebración de la patrona de las causas imposibles para seguir luchando contra el cierre de una unidad de Infantil. "Santa Rita, Rita, Rita, a unidade non se quita" fue el grito unánime que salió de las gargantas de los cientos de personas congregadas ante la capilla situada en Campelo, a muy pocos metros del colegio de San Clemente.

A la movilización - convocada por las familias en la jornada festiva en la parroquia- se sumó una nutrida representación del profesorado del centro y las tres fuerzas políticas con representación en el Concello encabezadas por el alcalde, Jacobo Pérez, el teniente de alcalde, Manuel Fariña, y el portavoz del PP, Fernando Pérez.

Los afectados decidieron seguir adelante con nuevas propuestas tras la reunión del martes en Santiago con el director xeral de Centros, Jesús Manuel Álvarez Bértolo. La reunión - que superó las dos horas de duración- se cerró sin ningún tipo de compromiso concreto por parte del representante de Educación más allá de volver a estudiar la situación. 

La tercera unidad de Educación Infantil del CEIP San Clemente se suprimió a principios del actual curso por un "erro administrativo" al contabilizar de forma errónea el número de matrículas. Pese a admitirlo la Xunta - dicen los afectados- se negó a solucionarlo y condicionó el obtener un número suficiente de matrículas para el curso 2025-2026. La comunidad educativa incide en que tras conseguir 11 solicitudes Educación insiste en su negativa y - tras abrir un proceso de baremación- dejó fuera a dos alumnos y busca agrupar en dos aulas a los pequeños de 3, 4 y 5 años.