Acosta, el médico que no se quiere jubilar: “En estos años, hubo avances impresionantes”

El vilagarciano Ignacio Acosta Crespo ya agotó todas las prórrogas posibles y, muy a su pesar, el 7 de julio comenzará su jubilación. Se ponen así fin a décadas de dedicación a la medicina, en la que fue testigo y protagonista de alguno de los “impresionantes avances”.
 

Por poner un ejemplo, fue el primer médico en subirse a un helicóptero, en la década de los años noventa. “Fue muy ilusionante”, recuerda. Hoy en día es impensable que no hubiese medios aéros para traslados sanitarios.
 

“Pero como muchas otras cosas”, señala Acosta, que incide en que desde que él comenzó “hubo avances impresionantes”. Como la digitalización de todo el archivo del Provincial que llegó, eso sí, tras un voraz incendio. “Cuando llegué al Meixoeiro, los partes quirúrgicos eran a mano”, recuerda Acosta Crespo, que destaca que “hoy los médicos pueden acceder al historial del paciente desde cualquier hospital gallego”.
 

En el sistema de digitalización de partes tuvo mucho que ver el médico vilagarciano, que diseñó en 1992 la plantilla que aún hoy se sigue utilizando También en el ámbito asistencial destaca “espectaculares” cambios, como la espera preoperatoria, que “pasó de cinco o seis días a uno”.
 

Dilatada trayectoria

Ignacio Acosta no siempre quiso ser médico. Le llegó la vocación con 17 años, sin antecedentes familiares en la profesión, pero lo cogió con tanta pasión que una sobrina y un hijo han seguido sus pasos, mientras que otro, que se dedica al diseño industrial, ya ganó varios premios con productos relacionados con el ámbito médico. Acosta Crespo lleva 22 años en el CHOP, pero antes trabajó como directivo del Xeral Cíes de Vigo y coordinando el servicio de Admisión del Meixoeiro. Se lleva con la bata muchas noches sin dormir, preocupaciones y multitud de alegría. A las siete y media de la mañana ya está en su puesto, “y aprovecharé hasta el último día”, asegura. En la jubilación, espera seguir aprendiendo y ya se apuntó a la Universidad de Mayores. También quiere disfrutar de la familia “y que me den algún nieto”, asegura.