De la Caballería de Dragones a ministros, médicos o ceramistas: Los personajes históricos de Vilagarcía

De la Caballería de Dragones a ministros, médicos o ceramistas: Los personajes históricos de Vilagarcía
Un retrato de Luis López Ballesteros

Científicos, un buen número de militares, varios ministros para todos los gustos y colores, un miembro del Regimiento de la Caballería de los Dragones, diversos funcionarios y nobles, pintores, músicos, ceramistas y hasta algún que otro obispo componen el elenco de la historia vilagarciana. Así lo recoge la web creada por la Real Academia de la Historia, con un mapa en el que se puede conocer los pasajes más destacados de la vida de estas personalidades.
 

En Vilagarcía y Vilaxoán son 19 los nombres que aparecen, con muy variadas profesiones y épocas históricas en las que las ejercieron. Comienza el listado con Juan Facundo de Acosta Romero, que nació en el siglo XVIII, en fecha por determinar. Su carrera comenzó como capitán de ingenieros, pero en las Islas Filipinas se pasó a la vida conventual, aprendiendo y dominando la lengua de los pueblos de Pasig y Antique y redactando un Arte Bisaya o gramática.
 

Más reciente es José Luis Alonso Fuentes, profesor y grabador, que se especializó en la ilustración de libros. La web, que no utiliza un orden cronológico, también recoge la historia de Fernando de Andrade y Sotomayor, graduado como doctor en Cánones y  nombrado inquisidor de Sevilla en 1627. Fue también gobernador de Galicia, capitán general de Cataluña y, desde 1950, marqués de Vilagarcía. Otro destacado en el mundo del arte es Manuel Cortés Galiñanes, muy vinculado a Rivas Briones y pensionado por la Diputación de Pontevedra.
 

Actividad política

En el ámbito político, hay una gran diversidad. La familia López Ballesteros dio dos personajes históricos: Luis, nacido en 1782, que como director general de Rentas de Fernando VII (con quien también fue ministro de Hacienda) estableció el sistema de presupuestos anuales de gastos e ingresos; y su hijo Diego, director general de Arbitrios, parlamentario del Partido Moderado primero  de la Unión Liberal después. Unos años más tarde, destacaría José Jorge de la Peña, médico liberal que tomó parte por la causa isabelina, diputado provincial en 1841,1843 y 1855 y miembro destacado de la Sociedad Amigos del País.
 

Más conocida es la labor de Laureano Gómez Paracha, también médico y político de la Federación Republicana Gallega durante la II República. Llegó a ser vicepresidente del Congreso en 1932 y ministro de Industria con Lerroux, al año siguiente. Votó a favor del derecho al sufragio para las mujeres. Tras el levantamiento franquista, fue detenido, encarcelado y, tras recuperar la libertad, se exilió a Argentina, aunque regresó dos años después. El exilio, aunque en este caso el francés, fue también obligado para el ceramista comunista Rafael Ochoa Carrasco, que destacó en el decorado de jarras, platos y vasijas. En el país vecino cambió de profesión y trabajó como redactor de un periódico.

 

Laureados militares

En el ámbito artístico destaca también Bernardo del Río y en el científico Gregorio González Trigo, promotor y cofundador de la Sociedad Española de Química Terapéutica. Como docente sentó las bases de lo que sería la Química Farmacéutica y su trabajo de investigación se encuentra en setenta y tres publicaciones, nacionales e internacionales.
 

El ámbito militar es el que aporta un mayor número de personajes históricos. Fernando Miranda recibió la Cruz Laureada de la Orden de San Fernando por campañas como la de Chile y Perú, al mando de Méndez Núñez; José Ramón de Ozores, señor de Casa Ruibianes, defendió la plaza de Guernica al mando de 200 hombres, según cuentan las crónicas de la época. En Vilaxoán nació Luis García Rodríguez, que pese a lo común de sus apellidos fue miembro del Regimiento de Caballería de Dragones y recibió diversos méritos y cruces laureadas. De San Martín de Sobrán era también Antonio Pedro Nolasco de Lanzós y Taboada, que con 16 años comenzó a servir al rey como conde de Taboada y llegó a ser virrey de Navarra y gobernador de Madrid. Recibió en 1738 el Collar de la Insigne Orden de San Genaro. Su hijo, Juan Andrés de Lanzós, fue consejero de Estado
 

San Pedro de Cornazo aporta la fitura de José López Crespo, que en 1859 fue nombrado obispo de Santander y fue un defensor del poder eclesiástico y contra medidas como el matrimonio civil.
 

De la Caballería de Dragones a ministros, médicos o ceramistas: Los personajes históricos de Vilagarcía

Te puede interesar